El mundo financiero está convulsionado con la declaración de Ernesto Clarens, el hombre de fuerte de Néstor Kirchner en la City. La citación por parte del juez Claudio Bonadío como imputado arrepentido generó un pánico que desplomó las acciones de los bancos tanto en el mercado de valores local como en Wall Street.

El financista comenzó su declaración describiendo acontecimientos ya conocidos por el juez, quién inmediatamente le hizo saber que eso no sería suficiente al igual que sucedió con Aldo Roggio. A partir de ahí, comenzó una nueva etapa en la declaración que terminó siendo explosiva, según revelaron fuentes al tanto de al declaración de este experimentado financiasta que viene manejando plata de la política desde el menemismo.

Este rumor causó un impacto demoledor en las acciones de los principales bancos. El Macro cayó un 1,91% y el Supervielle un 6,32%. La caída fue igual de contundente en los ADRs de esas instituciones que cotizan en Wall Street, donde los títulos se desplomaron un 2,21% y 5,53%, respectivamente.

Sin embargo, el golpe más fuerte le tocó al Banco Galicia, que vio caer el valor de sus acciones un 5,38% en Buenos Aires y un 5,64% en Nueva York. Como anticipó LPO, este banco transita un momento muy delicado luego que se supo que su ex directivo Luis María Ribaya analiza sumarse a la ola de empresarios «arrepentidos». Ribaya está mencionado en los cuadernos de Centeno y fue el hombre que le permitió al banco convertirse en uno de los aliados del mundo financiero más fuertes del kirchnerismo, gracias a su amistad con Julio de Vido.

«Esta caída representa una pérdida de 300 millones de dólares de valor para el Galicia. Imaginate que los inversores no están nada contentos y tal como les permite la ley de los Estados Unidos, si el origen de esta merma es un delito, tendrán derecho a reclamar hasta el último dólar mediante una demanda al banco por manejo delictivo», aseguró el analista de mercados Francisco Uriburu.

La caída de las acciones de este viernes del Banco Galicia representa para los inversores una pérdida de 300 millones de dólares. La ley de Estados Unidos les permite demandar al banco si se comprueba que el origen de esta pérdida de valor está vinculado con la revelación de que el banco cometió un delito.

La situación del Galicia encuentra algunos puntos de similitud con la crisis que vive Techint, cuyo dueño y CEO Paolo Rocca, confesó ayer públicamente que ordenó pagar coimas y de inmediato la acción de las empresas del grupo que cotizan en Wall Street, cayeron hasta un 20 por ciento.

De hecho, en el mercado prevén que en las próximas semanas se observe una caída de depósitos y clientes del Galicia. «¿Vos harías un plazo fijo con un banco en el que ves al tipo que maneja tu guita en televisión involucrado en escándalos de corrupción?», se preguntó un operador del mercado consultado por LPO.

La desesperación fue todavía mayor, ya que al ser feriado el próximo lunes en Argentina, pero no en Estados Unidos, los inversores locales no tendrán posibilidad de reacción ante posibles caídas que ocurran en los títulos de Wall Street durante el lunes.

La declaración de Clarens traccionó a todo el Merval a la baja, que tuvo un retroceso del 2,43% y se acercó a los 26.000 puntos, un nivel que los especialistas consideran como «el borde de la plataforma».

Sucede que Clarens es una persona con vínculos muy amplios en el mercado y de operaciones fuertes. El financista fue identificado por varios empresarios de la obra pública como uno de los actores centrales en el circuito de manejo de dinero negro del kirchnerismo. Su declaración podría ser la puerta de entrada para el juez Bonadío a la parte que le falta a su investigación: la parta financiera de los cientos -o miles- de millones de dólares de coimas que circularon durante el kirchnerismo. Montos que por su dimensión no se pueden mantener en cajas de seguridad.

Es decir, falta saber como hicieron las empresas para pasar plata a negro para pagar las coimas y como hizo el kirchnerismo y a través de que instituciones para blanquear parte de esos fondos.