Javier Sánchez Caballero, ex CEO de IECSA y detenido por el escándalo de los cuadernos, pidió declarar como arrepentido, según adelantaron fuentes de la investigación a Infobae.

Se sumará así al chofer de Roberto Baratta, Oscar Centeno, y al ex director de Isolux, Juan Carlos De Goycochea, quienes ya habían negociado con el fiscal del caso, Carlos Stornelli, ingresar al programa de imputados que colaboran con la investigación a cambio de una reducción en la pena.

La presencia del empresario Angelo Calcaterra (ex dueño de Iecsa y primo del presidente Mauricio Macri) durante la mañana de hoy en los tribunales de Comodoro Py para declarar ante Claudio Bonadio hacía prever que Sánchez Caballero se convertiría en arrepentido.

En su declaración espontánea, Calcaterra admitió que pagó coimas al gobierno kirchnerista. Dijo que fue presionado para «aportar» para las campañas electorales de 2013 y 2015. Si no lo hacía –dijo– no le liquidaban los certificados de las obras públicas que le habían asignado a su compañía.

A partir de hoy y hasta el próximo lunes, todas las miradas estarán puestas en los tribunales federales de Comodoro Py. Por el juzgado de Bonadio comenzarán a desfilar desde esta mañana los empresarios y ex funcionarios que fueron citados a declarar en la causa que investiga un presunto circuito de corrupción entre empresarios de la obra pública y la administración kirchnerista.

Foto: Manuel Cortina