El Papa Francisco donó 30 respiradores comprados en los últimos días por la Limosnería Apostólica, para entregarlos a algunos hospitales de las zonas más afectadas por la pandemia de COVID-19.

“Estas estructuras serán identificadas en los próximos días”, informó la Santa Sede. Debido a la falta de respiradores, algunas instalaciones italianas se ven obligadas a utilizar respiradores “Sistema D” fabricados con gafas de buceo adaptadas para aliviar a los pacientes en las unidades de cuidados intensivos.

Sin embargo, el número de personas contagiadas parece estar disminuyendo en Italia y, por lo tanto, la contención comenzaría a dar sus frutos.

Recientemente el limosnero del Papa Francisco, el cardenal Konrad Krajewski, visitó las tres comunidades de Roma en cuarentena debido a un contagio de Covid-19, para llevarles comida de la granja del Papa en Castelgandolfo.