Por Marina Vidal 

En los últimos meses, es notoria la cantidad de argentinos que visitan Chile con el objetivo de “ir de shopping”. Es que el país vecino cuenta con precios impensados de conseguir en territorio nacional. Desde Rosario, comenzaron a ofrecer paquetes que incluye tarde de compras y en los últimos meses, las ventas de éstos aumentaron un 20 por ciento con respecto al último año.

En diálogo con Conclusión, Andrés Fiorucci, vocero de la empresa Transatlántica, afirmó que en el último tiempo “muchos rosarinos llaman para averiguar sobre ese pack que incluye el día de compras por los comercios de Chile”.

“El paquete consta de tres días. Se toma el vuelo desde Buenos Aires hasta Santiago. Son dos o tres noches de alojamiento. Uno de los días la empresa cuenta con un traslado a los shoppings desde Santiago, los pasajeros tienen medio día de compras y luego los trasladan nuevamente al hotel”.

El vocero de la empresa aclaró que al otro día, el combo propone un city tour completo por Santiago de Chile.

En cuanto a los precios, Fiorucci aclaró: “Depende del hotel elegido, la fecha y si corresponde a temporada alta o baja. Un paquete que incluya hotel con desayuno base doble por persona cuesta alrededor de 600 dólares”.

Al ser consultado por los requisitos para ingresar al país las compras realizadas, el representante de turismo dijo que generalmente “no hay problemas con la indumentaria” y se permite el ingreso de “300 dólares en tecnología”.

Los que van en auto

El último fin de semana largo de octubre, cruzar la aduana llevaba seis horas de demora y la cola de autos para cruzar de país alcanzaba los ocho kilómetros de embotellamiento.

Es que familias cruzaron hacia Chile para comprar productos que en promedio son un 60% más baratos que en Argentina. Tecnología y ropa fueron los rubros más elegidos por los turistas, quienes en muchos casos aprovecharon también para pasear y disfrutar de los tres días. Otros directamente compraron y regresaron al país.

De acuerdo con cifras oficiales, al menos 26.000 argentinos viajaron al vecino país. Según el propio gobernador mendocino, Alfredo Cornejo, cada vez más por el paso a Chile cruzan la cordillera miles de autos sin importar la temporada del año. Las colas de vehículos abarcaron kilómetros y los controles migratorios colapsaron. «Ya no hay meses de temporada alta y bajas. Las colas de varios kilómetros y hasta diez horas de espera se repiten todo el año», dijo Cornejo al diario Clarín.

El ahorro es notorio

La diferencia del precio es notoria y miles dedicaron sus esfuerzos para conseguir especialmente indumentaria (zapatillas), tecnología (smartphones y televisores) o pequeños electrodomésticos.

Según algunos de los turistas que aprovecharon las ofertas, se consiguieron zapatillas Nike a $500 cada par. En la Argentina, en promedio, cuestan por arriba de los 1200 pesos. Un hombre reveló que adquirió un teléfono Samsung J1 Ace 4G a 1.900 pesos, mientras que en el país puede llegar a los 3000 pesos. Un televisor curvo de 65 pulgadas con definición ultra HD y 4K, que acá puede costar hasta 50.000 pesos, en Santiago fue posible comprarlo por menos de la mitad. Una tostadora cuesta apenas $200; en nuestro país el promedio supera los 400 pesos.

Al volver hay que presentar en la Aduana el recibo y mostrar que dentro de las cajas que contienen los productos adquiridos no haya oculto otro tipo de mercadería. Las leyes argentinas prohíben el ingreso de ciertos artículos. Por eso recomiendan informarse sobre lo que está permitido para no pasar un mal rato.

No se pueden traer cubiertas y llantas, estéreos o repuestos de autos. También están prohibidos los lavarropas, heladeras, cocinas, microondas y secadoras; y también los muebles y colchones. Aconsejan antes de salir, declarar los objetos electrónicos para evitar inconvenientes.

Los turistas deben llenar el formulario OM2087 de la AFIP y declarar todo lo comprado. Cada pasajero tiene hasta 150 dólares de franquicia y los menores de 16 años, 75 dólares. Si es un grupo familiar directo, pueden sumarse los montos.

Esto supone que una familia de dos adultos y dos menores puede ingresar sin pagar impuestos hasta 450 dólares. En caso de exceder el límite, por pasajero o grupo familiar se debe pagar un 50% de recargo por el saldo que quedó fuera de la franquicia. Lo llamativo es que incluso pagando ese excedente, sigue siendo más económico comprar en Chile.

El personal de la AFIP exige los tickets y facturas de las compras. Los controles siguen en la ruta y si Gendarmería encuentra productos de contrabando, los decomisa.