“Planta tu propio jardín y decora tu propia alma, en lugar de esperar que alguien te traiga flores”, Jorge Luis Borges.

Por Alejandro Maidana

En la ciudad de Rosario existían pocos viveros y la gente concurría a los mismos en búsqueda de alguna que otra planta. Esto ha cambiado, ya que en la actualidad podemos encontrar en los diferentes barrios, locales que ofrecen desde plantas, arbolitos, cactus, tierra, abonos, macetas e infinidad de herramientas y productos ligados a la jardinería.

Sebastián Ruto, titular desde hace un año de una casa de plantas ubicada en calle Buenos Aires, comentó a Conclusión que «hay más planterías porque vivimos en una ciudad que se ha cubierto de cemento por el auge inmobiliario. Las personas necesitan tener otro tipos de cosas, pienso que la plantas hacen un aporte muy importante en el desarrollo personal anímico y espiritual. Necesitamos estar en contacto con seres vivos y las plantas son compañías verdes que nos dan energía”.

Los viveros al encontrase en puntos estratégicos dentro de la ciudad y alrededores, carecían de una vinculación directa con el vecino.“La diferencia de una plantería y un vivero es que este último tiene tierra y las casa de plantas no. Yo comencé en este rubro quizás sin pensarlo por herencia de mi familia. Me di cuenta que las plantas son algo muy lindo y lo tomé como algo terapéutico. Me inicié en mi terraza, cultivando y reproduciendo plantas de todo tipo y cada vez tenía más ejemplares. Fue ahí cuando decidí montar este lugar. En mi caso particular por mi estudios trato de fusionar los seres vivos con mis sentimientos por el arte”.

“Hay gente que viene con alguna idea en especial y otras no. Por lo general todas las personas buscan asesoramiento de lo que se está llevando y como lo tiene que cuidar. Básicamente tienen que comprender que se llevan un ser vivo y que para mantenerla deben ser responsables”, enfatizaba.

Entre las plantas más vendidas se encuentran los cactus y las suculentas que últimamente han tenido gran protagonismo en las redes sociales. Las imágenes han marcado tendencia y hasta se han creado grupo de seguidores de los mismos. Estos ejemplares son de fácil mantenimiento y decoran los espacios ya que son objetos de diseño único.

Es importante un concepto que destacaba Sebastián sobre la importancia del uso de productos orgánicos: “No hay tanta concientización sobre esto. Las aromáticas y las hortalizas (que son comestibles) deben ser bien tratadas cuando poseen una peste. Ya que se debe tener en cuenta que el insecticida químico que se coloca tarde o temprano ingresa en nuestro organismo. La idea que tenemos acá es que no se venda ningún tipo de veneno sino que tratamos de encontrar una receta casera. Siempre darle una oportunidad a los insecticidas orgánicos, que los hay de todo tipo y clase. La gente debe entender que los productos químicos nada tienen que ver con las plantas”.

De a poco los rosarinos paramos un segundo con las actividades cotidianas y nos tomamos un ratito para cuidar de nuestras plantas. Ellas no sólo aportan arte y color a nuestras viviendas, sino también la oxigenación de nuestros espacios y ese contacto con la natural que se va perdiendo masivamente.