Por Néstor Giuria

A punto de finalizar la participación del boxeo en los Juegos Olímpicos, una nube de sospechas envuelve el accionar de los diferentes jurados. Fallos sospechosos y cuestionados, dieron lugar para que la Asociación Internacional de Boxeo Amateur (AIBA) apartara a los jueces que tomaron decisiones controvertidas.

Las autoridades del alto organismo de control anunciaron el pasado miércoles  que un grupo de árbitros y jurados no podrán dirigir ningún combate más, en lo  que resta de la competencia.

«Una comisión revisó todas las decisiones y determinó que un puñado de fallos no estuvieron al nivel de lo esperado. Consecuentemente, se ha decidido que los jueces y árbitros involucrados no podrán seguir ejerciendo en los Juegos de Río”, señaló la Asociación en un comunicado, sin especificar cuántos ni quiénes son los apartados.

Los aficionados que asistieron a los combates de Río se mostraron muy molestos con el resultado de algunos combates, en especial, la victoria del ruso Evgeny Tishchenko ante el kasajo Vassily Levit en la final de la división de los pesados.

Por su parte, el boxeador irlandés Michael Conlan aseguró: “Me robaron», luego de su derrota ante el ruso Vladimir Nikitin, en la categoría gallo. También asentó sus críticas, el norteamericano Gary Antuanne Russell, al finalizar su pelea ante el uzbeco Fazliddin Gaibnazarov en superwelter.

No obstante, la AIBA rechazó las acusaciones de corrupción e invitó a los pugilistas, como Conlan, a demostrar con pruebas sus duras declaraciones.