Confederaciones Rurales (CRA) se convirtió en una de las entidades más críticas del Gobierno. Su presidente, Dardo Chiesa, es un experimentado dirigente que viene desde el inicio de la gestión planteando sin tabúes los problemas que afectan a los productores.

En un reciente editorial titulado «Andar a ciegas», Chiesa sostuvo que «el sector agropecuario enfrenta una de sus crisis estructurales más serias de las últimas décadas con una sequía desoladora que abarca todo el corazón agrícola-ganadero del país».

«Cada productor es un universo y éste está herido casi sin salida ni climática ni económica. El impacto negativo pone al productor en una situación muy difícil de afrontar y que le llevará años salir, si es que no queda en el camino», afirmó Chiesa.

Pero lo más polémico viene después. A pocos días de concretarse la venta de SanCor a Adecoagro, el presidente de CRA apuntó: «A una empresa privada le derivaron solo el año pasado 500 millones de pesos para su rescate», criticó el dirigente.

«Es el mismo monto (los 500 millones de pesos) que derivaron para toda la emergencia climática de 20 provincias», indicó Chiesa, para luego mencionar que «no hay equidad de trato y menos al sopesar realmente el daño al productor y a país de estos eventos».

El presidente de CRA se quejó porque los fondos de la Ley de Emergencia están congelados hace varios años. «Los 500 millones de pesos es la nada misma frente a la pérdida; no se ha debatido un mecanismo institucional de contención y ayuda», dijo.

La suma de cheques sin fondos librados por SanCor es de $ 876 millones, de los cuales $ 38,7 millones fueron levantados con nuevos cheques de pago diferido. Los últimos cheques rechazados, según datos del Banco Central, ingresaron el pasado 12 de marzo

La cooperativa láctea además cuenta a la fecha con una deuda bancaria por un total de $ 44,5 millones, la mayor parte de los cuales corresponden al Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE) y el Nuevo Banco de Santa Fe, según valorsoja.com.

Cabe mencionar que el sector agropecuario aportó de 2002 a 2017, un total de u$s 86.400 millones. Sólo el complejo sojero aportó u$s 64.000 millones en ese periodo y el campo tributará una suma cercana a los u$s 7.100 millones en 2018 y 2019.

«El campo nunca le sacó el hombro al país; es el sector más competitivo del país, el único que ha generado inversión genuina en éste nuevo proceso. Hoy necesitamos una definición concreta del Estado para solucionar los problemas», concluyó Chiesa.