Empleados y delegados de Triángulo color acompañados por la Asociación Empleados de Comercio se manifestaron en la puerta de los domicilios de los titulares de la empresa en reclamo de los sueldos adeudados y una pronta respuesta sobre la situación de los trabajadores. Desde que el comercio cerró sus puertas se cayeron tres acuerdos que los empresarios debían abonar y hasta el momento la situación del personal es incierta.

En diálogo con Conclusión, el delegado Darío Soldani expresó su preocupación por el futuro de los trabajadores y dijo que “nosotros vamos a manifestarnos en la puerta de cada dueño porque los titulares Pablo y Nadia I. que heredaron, recibieron o compraron de otro dueño, uno su padre y otro socio más no nos dan respuestas”.

Además agregó que “queremos que alguien se haga cargo, porque no podemos comprender cómo toman empresas personas insolventes. Si vos tomas una empresa tenés que ser solvente para que tus empleados puedan cobrar y en una situación como esta puedan responder. Si no son ellos tienen que ser los dueños anteriores, porque los dueños anteriores entregaron la empresa, la vendieron o cedieron sin ningún respaldo de los otros dueños”, agregó.

En el mismo sentido indicó que “no recibimos telegrama, tuvimos que mandar una intimación nosotros porque no recibimos nada de parte de ellos y estamos esperando”.

Por otra parte remarcó que “no podemos esperar hasta el 6 del mes que viene que hay una audiencia, para ver qué vamos a hacer porque los compañeros necesitan cobrar y comer. La realidad es que nosotros tenemos que ir al súper a comprar para comer y no tenemos un peso”, se quejó.

“Los dueños fueron citados por el Ministerio de Trabajo y lo que ellos alegaron fue que querían  despedirnos con media indemnización. Pero es una total mentira, no hay quiebra, no hay telegrama de despidos, no hay absolutamente nada”, manifestó el delegado.

Y se justificó “por eso venimos acá, para que se hagan cargo y respondan. Si no responden ellos que respondan los dueños anteriores, porque entregaron la empresa con deudas y un montón de problemas, por lo cual nosotros no podemos ser responsables. Porque siempre en este país terminan pagando el pato los empleados, siempre se corta el hilo por lo más delgado”, enfatizó.

Un total de 29 empleados perdieron su fuente de trabajo tras el cierre de la empresa, uno de ellos, Sergio dijo que “creemos que hay una estrategia programada entre estos dos  nuevos dueños en lo cual han demostrado que están bien asesorados por los abogados  y con una total responsabilidad de los dueños anteriores que le generó a ellos, hectáreas de campo, soja y propiedades, es decir que con una mínima intención podrían haber dejado esta empresa sin deuda para poder seguir a delante”.

“Los empleados hemos luchado a la par de ellos para sacar esta empresa adelante pero hay una desinversión desde hace aproximadamente cuatro años a esta parte que terminó en esto”, señaló Sergio.

Y agregó: “Si hay alguien que tiró la empresa abajo fueron ellos”, además agregó que “todos los acuerdos que estaban previstos se fueron cayendo nos adeudan alrededor de tres meses, que se hagan cargo de lo que les corresponde”, reclamó.