Los empresarios recibieron hoy al Gobierno en el Consejo de las Américas con un fuerte pedido para reducir los costos logísticos y operativos del sector productivo, para motivar inversioneslocales y externas.

Jorge Luis Di Fiori, presidente de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios, expuso sus expectativas positivas por el regreso del país a los mercados de capitales.

Celebró el empresario el intercambio de ideas abierto con la administración Macri y afirmó que ese diálogo hará que «en la puja entre hacedores y saqueadores, ganen los hacedores».

Sostuvo el empresario que los logros y desencuentros del pasado invitan a enfrentar los desafíos, «dejando atrás grietas» políticas y sociales en un marco de «principios de la libertad económica e iniciativa privada».

Según dijo Di Fiori, en orden prioritario se requiere fortalecer las instituciones públicas con una visión clara y se expresó a favor del reordenamiento de la economía, lo cual «no es solo responsabilidad del Gobierno sino también de los empresarios y de los trabajadores».

Aunque sin mencionar al kirchnerismo, el empresario cuestionó en duros términos el modelo económico que impulsaron Néstor y Cristina Kirchner al afirmar que ese camino conducía a la Argentina «inexorablemente al mayor de los fracasos».

Por ello, al hablar del nuevo gobierno, el hombre de negocios destacó la eliminación del cepo cambiario, de los derechos de exportación y la regularización de las deudas externa con el pago
a los holdouts y la salida definitiva del default.

«Quedan aún deudas como el déficit fiscal, la presión impositiva y la inflación», enfatizó Di Fiori e insistió:

«Soportamos una excesiva carga tributaria que afecta la competencia y la productividad».

El empresario propuso de que el costo del transporte interno de mercancías «debe reducirse de modo sustancial» dado que «sólo así lograremos que la mejora económica alcance a todo el país».

Ante la atenta mirada del jefe de Gabinete, Marcos Peña, y otros ministros en el auditorio, Di Fiori pidió al Gobierno «un enfoque integral y con soluciones sólidas» a la hora de atacar los problemas de la economía.

«Es incomprensible que desde hace más de 50 años estemos discutiendo los mismos problemas sin poder resolverlos. Ahora nuestro país está creando las condiciones para motivar las inversiones», expresó.

Pero aclaró que las inversiones externas no vendrán a la Argentina si los capitales nacionales no dan una señal de confianza y salen a jugarse con intervenciones en la economía real para aumentar la productividad.

«Sabemos que el rol del empresariado es clave, pero necesitamos que el Estado siga generando las condiciones necesarias para las inversiones», sostuvo el empresario al abrir el Consejo de las
Américas en un lujoso hotel porteño.

Y al concluir, dijo: «Aspiramos a que la inconducta y las estructuras de corrupción sean erradicadas para siempre de las instituciones públicas y privadas, cambiando por la austeridad y
honradez».

Susan Segal, presidenta y CEO de Americas Society, co-organizadora del Consejo de las Américas, resaltó el «entusiasmo general» que despierta la Argentina hoy a nivel global.

Señaló en ese sentido que el cambio de imagen del país ante la comunidad internacional se dio, por ejemplo, por la decisión oficial de volver al mercado de capitales internacional.

«Hoy Argentina tiene una curva de rendimiento que es inexistente desde hace treinta años. Esto permite el acceso de los capitales a menor costo y a más largo plazo», expresó Segal.

Y destacó la iniciativa del macrismo de ingresar a un marco comercial global, como el acuerdo en el que se avanza con la unión Europea y la idea en maduración de sumarse a la Alianza del Pacífico.

«La Argentina está trabajando proactivamente para atraer inversiones con una política económica previsible que marcha con reglas claras y previsibles, muy importantes para los inversores», dijo Segal.