La noticia estalló como reguero de pólvora, uno de los jóvenes más buscados por la reciente ola de violencia desatada en la ciudad, sobre todo en la zona sur. Alan Funes fue detenido esta mañana junto a su novia en una departamento del Fonavi ubicado en Callao al 3900. Y pasadas las 10.30, en medio de un gran operativo de seguridad, Funes fue trasladado por las fuerzas policiales a su destino, el cual aún se desconoce.

Alrededor de las 7 de este martes, efectivos de la Policía de Investigaciones y de la Gendarmería Nacional irrumpieron en del departamento mientras la pareja dormía. Según el relato de la ministra de Seguridad, el joven se mostró sorprendido y no tuvo capacidad de reacción. «Tenía una pistola 9 milímetros escondida debajo del bidet», dijo la funcionaria.

Los primeros trascendidos dieron cuenta de que la pareja llevaba más de un mes viviendo en la zona pero recién esta semana lograron cercarlo. Ya había habido un allanamiento el lunes, pero no lograron dar con él.

Alan Funes es uno de los más conocidos integrantes del clan que se disputa territorio en la zona sur con con Alexis Camino, y que está acusado de un homicidio y se encuentra con prisión domiciliaria.

El joven está acusado de haber asesinado el 1 de mayo de 2016, cuando era menor de edad (17 años), a Eugenio “Pupi” Solano. Se presume que cometió el crimen en venganza de la muerte de su madre, Mariela Griselda Miranda, quien fue baleada desde una moto. Estuvo detenido en el Instituto para la Recuperación del Adolescente (Irar) y recibió el beneficio del arresto domiciliario a inicios de octubre del año pasado.

Jorge “El Gordo” Funes, el padre de Alan y Lautaro “Lamparita” Funes, fue baleado el primer día del año en El Aguaribay y El Timbó, en la localidad de Alvear. Jorge fue baleado en zona lumbar, rostro y abdomen. La Policía de Investigaciones (PDI) levantó las vainas servidas del lugar e incautó un arma de fuego en el patio de la vivienda del “Gordo”.