Luego de varios años de reclamos, finalmente la Justicia ordenó la clausura del Basural de Pérez, dándole así la razón a los vecinos de Pérez que hace años vienen luchando contra la contaminación ambiental que provoca el basural.

Los vecinos reclamaban, fundamentalmente, el cese de los olores nauseabundos y la clausura y remediación de las piletas de depósitos de líquidos cloacales e industriales que, en su momento, había dispuesto la Secretaría de Medio Ambiente de la Provincia de Santa Fe pero que, en los hechos, nunca se cumplió.

 Las lagunas de depósito de líquidos cloacales e industriales, funcionaron desde el año 1997, bajo el proyecto denominado “Basural Rappetta” y desde su origen los vecinos de Pérez denunciaron la afectación de su salud, el medio ambiente y el perjuicio de su calidad de vida.

 «Llegado el año 2010, con el pueblo en la calle por las continuas marchas ciudadanas que repudiaban el accionar de la empresa y la connivencia del gobierno local de turno, lograron los vecinos que se dictaran ordenanzas municipales, sobre la regulación del transporte de residuos, la prohibición de recepción, tratamiento y disposición final de líquidos y residuos industriales, y su posterior clausura”, señaló el abogado Federico Yolly

 Ante la clausura sancionada por Ordenanza Municipal, fundada en el incumplimiento del Decreto 101/03, el estado de total colapso del sistema de tratamiento de líquidos, el Director Provincial Zona Sur de Medio Ambiente resolvió, el 13 de diciembre de 2010, que la empresa Séptima Región no podía seguir operando en la actividad, e intimó a la misma a la presentación de un Plan de cierre y remediación de las lagunas, minimizando la generación de olores.

 Ante ese hecho, los dueños del basural de Pérez llevaron la cuestión a la justicia demandando la anulación de las ordenanzas municipales y las resoluciones de la Secretaría de Medio Ambiente.

Una vez más los vecinos se hicieron escuchar. Gracias a la intervención de la ONG Ojo ciudadano, quienes fueron autorizados a intervenir en el juicio, bajo la representación de los doctores Federico Jolly, Nicolás Mayoraz, Gilda Smerilli y María Bernardita Iturraspe y luego de cinco años de proceso judicial, la Cámara Contencioso Administrativa de Rosario les dio la razón y rechazó el reclamo del Basural de Pérez.

 De quedar firme la sentencia, los vecinos ya piensan en exigir la remediación ambiental y monitorear el cierre de las actividades prohibidas.