La esencia del éxito en el fútbol son los resultados y Paolo Montero está aprobando la materia. Con el buzo de Rosario Central, el entrenador uruguayo consiguió 13 de los 18 puntos disputados, consiguiendo cuatro victorias en seis partidos.
Es cierto que no comenzó con el pie derecho en Arroyito, cuando perdió por la mínima ante Godoy Cruz y dejó una sensación de disconformidad en los hinchas, que lo comparaban con la gran campaña de Eduardo Coudet.
Montero tenía en claro que debía someterse a las comparaciones y no se achicó. Al contrario, siguió trabajando para conseguir buenos resultados al frente del elenco canalla. A lo largo de seis fechas, cosechó 4 triunfos y apenas un empate y una derrota.
Cuando se analiza el juego de Montero, se divisa un equipo cuando ataca y otro distinto cuando defiende. Así fue que convirtió ocho goles y le convirtieron cinco, un número poco feliz en la faceta defensiva.
No obstante y más allá de los análisis, los números hablan por sí solos. Y dicen que Paolo Montero está cumpliendo las expectativas como técnico de Central, ya que la cosecha de puntos le sirven al club de Arroyito para ilusionarse con la clasificación a alguna copa internacional.
Era el objetivo desde que vino: apuntar a la Copa Sudamericana como mínimo, ya que la pobre última campaña del Chacho lo había dejado lejos de la pelea por el título. Trepó varios peldaños en la tabla de posiciones y se mantiene a dos unidades de Lanús, el último en ingresar al certamen internacional.
En resumen, los 13 puntos sacados por Montero de 18 posibles y las cuatro victorias en seis partidos al frente de los canallas son una buena producción. El fútbol no sólo son resultados, pero en definitiva, son ellos los que determinan el éxito o no de una conducción técnica.
Marco Ruben volvió a la titularidad y le dio la victoria a Central
