Por fin, después de una incansable lucha llevada adelante por la Asociación de Empleados de Comercio, la legislatura de la provincia de Santa Fe aprobó la ley de descanso dominical para los trabajadores mercantiles.

Tal como sucedió en el Senado la semana pasada, los diputados provinciales aprobaron esta vez con treinta y un votos positivos, una abstención y diecisiete ausencias la citada ley. A partir de ahora, sólo resta su promulgación por parte del gobernador Bonfatti y la adhesión de cada municipio santafesino para que se cumpla efectivamente.

Así, las instituciones de la democracia respondieron de manera rápida y pertinente a la maniobra con la que el supermercado Coto pretendió extorsionar a los legisladores al suspender a 150 trabajadores, contratar matones y amedrentar a empleados. Todo ello con el objetivo de preservar sus intereses a costa de los derechos logrados en 1905 y anulados en 1991 por el decreto de desregulación económica, impulsado por Domingo Cavallo.

Sumado al contundente pronunciamiento de la legislatura, el ministerio de Trabajo provincial decretó la conciliación obligatoria para que los trabajadores suspendidos comiencen el camino de su reincorporación.

De esta manera, la ley ingresó en la historia grande de los trabajadores al recuperar su derecho al descanso frente al abuso de poderosas empresas, nacionales y extranjeras, que tuvieron que allanarse a lo propuesto desde una inquebrantable, sostenida y organizada lucha que los trabajadores llevaron hasta su coronación.