Desde hace algunas semanas se viene registrando en algunas zona, un aumento de los casos de Fiebre Hemorrágica Argentina. Si bien el incremento es leve, los casos actuales registrados en la provincia de Santa Fe están un poco por encima de la media que se registra en esta época.

Para profundizar en el tema, Conclusión entrevistó al subdecano de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Rosario, el infectólogo Damián Lerman, quien confirmó la tendencia en la suba de casos de la Fiebre Hemorrágica. «Hay un mayor número de lo que veníamos viendo en meses anteriores», apuntó el especialista.

Las razón de ello tiene que ver con situaciones propias de la patología. Lerman señaló que «estamos en los meses en los que se puede dar este tipo de curvas, es una enfermedad que tiene una ubicación suburbana y rural, por eso la insistencia con la vacunación, ya que el sur de la provincia de Santa Fe es una zona endémica».

La Fiebre Hemorrágica Argentina es una enfermedad viral aguda grave, que se contagia por aspirar los vapores de la orina, saliva o material fecal de ratones infectados. Además, también puede contagiarse a través de lesiones en la piel, por más pequeñas que sean. El virus puede ser letal en un 20% de los casos o dejar secuelas graves.

El infectólogo detalló que los síntomas del también llamado Mal de los Rastrojos, son similares a los «específicos de estas enfermedades virales». «Fiebre, dolor de cabeza, dolor detrás de los ojos, en la espalda, decaimiento. El tiempo de incubación es de dos semanas a partir de que se estuvo en contacto con el virus».

Lerman remarcó que la vacuna es obligatoria y gratuita y se aplica a partir de los 15 años. «No es una vacuna tan popular, pero hacemos hincapié en que aquellos que viven, trabajan o son asiduos a zona suburbanas y rurales, donde pueden habitar los roedores, tienen que vacunarse. Así que es muy importante difundir que la vacuna existe y es gratis, incluso porque mucha gente que vive y trabaja en zonas urbanas muchas veces viaja asiduamente a lugares cercanos y puede tener contacto con roedores infectados».

En cuanto a la vacuna, se aconseja que haya un plazo de unas cuatro semanas entre otras vacunas y la de la FHA. En tanto, ante el incremento de casos, la Sociedad Argentina de Infectología recomendó a los equipos de salud prestar atención a los cuadros febriles que además presenten dolores de cabeza, decaimiento, lumbalgia, dolor detrás de los ojos, entre otros síntomas.