El gigante estadounidense de la informática Apple apuesta al lanzamiento el viernes de su nuevo iPhone 7 para encontrar un nuevo impulso en el mercado de los teléfonos inteligentes, en momentos en que su rival Samsung está en pleno declive.

La última versión del célebre iPhone presenta mejores capacidades en cámara y video, mayor resistencia al agua, una mayor capacidad en su batería y a diferencia de sus predecesores desde 2007 no tendrá la entrada «jack» de 3,5 mm que sirve para conectar los audífonos.

El precio del iPhone variará en los 25 países donde será puesto a la venta el viernes pero estará disponible en Estados Unidos por 640 dólares sin incluir los impuestos y en Francia por 769 euros. Una versión de iPhone 7 Plus también estará a la venta. Apple, que a diferencia de lo que hacía habitualmente no revelará la cifras de ventas del primer fin de semana, apuesta en grande con este nuevo modelo, luego de que las ventas del iPhone cayeran en dos trimestres consecutivos, afectando en consecuencia una reducción de los beneficios del grupo.

Los problemas de Samsung, que tuvo que retirar del mercado su último modelo Galaxy Note 7 por riesgos de explosión de la batería, pueden constituir una ventaja para el grupo de Cupertino (California).

Las empresas telefónicas estadounidenses Sprint y T- Mobile han anunciado que los pedidos anticipados del iPhone 7 y el Plus son superiores a los recibidos para los modelos precedentes. «Los pedidos anticipados de este nuevo modelo son cuatro veces superiores al iPhone 6», señaló el director ejecutivo de T- Mobile, John Legere, durante una video-conferencia en el sitio Periscope.