La Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana realizó múltiples intervenciones urbanas en horario nocturno durante los cuales se efectuaron controles sobre los conductores y sus vehículos. Un total de 53 unidades fueron remitidas al corralón municipal, 19 de ellas por alcoholemia positiva.

Entre el jueves pasado y la madrugada de este domingo, personal de las áreas de control municipales en colaboración con efectivos de la Unidad Regional II de la Policía de Santa Fe, efectuaron controles callejeros nocturnos, con fines preventivos, sobre el uso y permanencia en los espacios públicos. En dichas intervenciones, entre las diversas acciones que se emprenden, se revisan las condiciones de conducción.

Fuentes oficiales informaron que durante las tres jornadas, se efectuaron 53 remisiones vehiculares. Unos 34 traslados fueron concretados debido a que los conductores no pudieron presentar en forma la documentación, propia y del vehículo, que es obligatoria para circular;  así como tampoco mantenían las condiciones de seguridad requeridas. Por otra parte, los restantes 19 son casos de alcoholemia positiva, es decir, son unidades cuyos conductores mantenían niveles de alcohol en sangre incompatibles con la conducción.

En tanto, agentes de la secretaría, en coordinación con la Policía de Acción Táctica (PAT) realizó patrullajes y algunos puntos fijos en zonas claves de la ciudad. En inmediaciones de la Parque España, Parque Irigoyen y La Isla de los Inventos se remitieron 5 vehículos sin documentación, se disuadieron algunos autos con música en altos volúmenes y se volcó el contenido de varias botellas a aquellos que estaban consumiendo alcohol en espacios públicos.

La intensificación de la presencia del Estado forma parte de la iniciativa de la Intendencia municipal de mejorar las condiciones de seguridad en los entornos urbanos. Uno de los ejes programados es el control vehicular, sobre todo, de las motos con más de dos pasajeros.