Este martes al mediodía, desde el Ministerio Público de la Acusación informaron algunos detalles de los primeros datos de la investigación por el crimen de Joaquín Pérez, asesinado a balazos el martes por la noche en barrio Arroyito, y revelaron que el muchacho recibió dos disparos y que durante la autopsia se pudo recuperar una bala calibre 40 de la zona de la ingle.

«Concretamente, en la autopsia realizada ayer, se pudo extraer un proyectil, calibre 40, que coincide con el arma encontrada en el vehículo de la víctima y que se presume que es el arma utilizada. En este momento se está realizando el cotejo de balística», explicó Sebastián Carranza, vocero de la Fiscalía.

Carranza precisó que hubo dos asaltantes, que llegaron en motocicleta, y se infiere que luego de herir a la víctima, «uno de los agresores huyó en la moto y el otro en el auto». «No hay otro indicio de que esto no sea un robo al boleo, sin inteligencia previa, sino que vieron la oportunidad de sustraerle sus pertenencias a la víctima y por alguna razón que todavía no tenemos claro,  le dispararon. Entendemos que en el apuro de escapar de la escena del hecho, dejaron auto encendido y se les ha caído el arma».

El funcionario judicial aseguró que hay gran cantidad de cámaras, públicas y privadas, cuyas imágenes se están relevando. «Algunas tienen ángulos más nítidos que pueden servir para la posible identificación de las personas que lo atacaron».

En cuanto a la mecánica del hecho, Carranza aseguró que se están corroborando ciertas informaciones y hay líneas investigativas que se mantienen en reserva para preservar la investigación.