Propietarios de gimnasios de la ciudad volvieron este martes a manifestarse frente a la Municipalidad de Rosario para reclamar la apertura de sus locales. Entregaron un petitorio dirigido al intendente Pablo Javkin y luego se movilizaron a la Sede de Gobernación para entregar otro. En ambos piden también mayores subsidios que les permitan paliar los efectos económicos de la pandemia.

«Primero pedimos la pronta apertura de nuestros locales, pero también subsidios, porque si bien se nos dio, todavía no se nos otorgó. Tenemos que inscribirnos hasta el 29 de septiembre y luego se abonará a finales de octubre», contó Waldemar Vidal, secretario de la asociación de gimnasios, en declaraciones a Conclusión. 

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Al referirse al monto de la asistencia estatal, el representante del sector indicó que «el subsidio es de 30 mil pesos y la verdad que con los gastos que tiene nuestro rubro, por más que tengas un gimnasio chico, no llegás a pagar ni la luz. Es poco».

Dentro del petitorio entregado a las autoridades también incluyeron el pedido de ser declarados agentes de salud. «Es lo que somos, buscamos ser reconocidos. Está comprobado que la actividad física hace bien. No solamente al cuerpo, sino también a la mente», argumentó Vidal.

Desde la Municipalidad les han planteado la semana pasada la posibilidad de evaluar una vuelta pero aplicando una mayor ventilación de los establecimientos debido a las temperaturas primaverales que se acercan, para trabajar con ventanas y puertas abiertas y los extractores funcionando permanentemente. 

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Ante esta oportunidad, Vidal destacó que en el sector están de acuerdo con lo propuesto municipalmente y buscarán la forma de ventilar aún más los espacios. Después de esa reunión en la que hubo coincidencia en los requerimientos para volver a abrir, -según contó- esperaban estar habilitados tras los anuncios del gobernador Omar Perotti.

«Fue muy feo. Nos hizo acordar a cuando esperábamos quince días y nos decían ‘otros quince más’ y así continuamente. Creo que las cosas se pueden hacer más rápido. La apertura se puede lograr porque todos estamos preparados para abrir cuando nos digan», resaltó el secretario de la asociación de gimnasios. 

Desde el sector advirtieron que ya hay «muchos gimnasios» que han cerrado sus puertas y otros que están por hacerlo. «Si aparece otra negativa, no sólo cierra la fuente de trabajo de una persona, afecta a muchas que no van a tener dónde trabajar», concluyó Vidal.