El encargado de la arrocera donde fueron detenidos Víctor Schillaci y Christian Lanatta contó que minutos antes de la captura lo «tomaron de rehén» y que lo «trataron bien» pese a que le dijeron que podrían usarlo «de escudo» en caso de un nuevo tiroteo.

Rehén«Entro a trabajar y ellos me toman de sorpresa, veo que están vestidos de verde, abro la puerta para decirles que yo era el encargado y me apuntaron con una pistola nueve milímetros«, indicó a la prensa Franco, encargado del molino arrocero Spalletti.

Según su relato, los ahora detenidos le dijeron que se «quede tranquilo y que colabore» con ellos y le pidieron agua y comida.

«Me di cuenta enseguida que eran ellos pero me hice el tonto, como que no sabía nada. Me dijeron ‘no te hagas el tonto que vos sabes quienes somos nosotros’, pero a pesar de todo me trataron bien«, aseguró.

El hombre dijo que Schillaci y Lanatta, ambos armados, le pidieron que no haga «ninguna macana» porque ellos ya se habían «agarrado a tiros» y no tenían ningún problema en usarlo «de escudo».

Minutos después llegaron los efectivos de la Policía santafesina que detuvo a los prófugos.