Inversores desarmaron ayer posiciones en dólares para aprovechar las tasas en pesos en la plaza doméstica, lo que presionó a la baja el precio de la divisa en el segmento mayorista, donde cerró a 17,27 pesos, mientras en pizarras se vendió a 17,60 pesos en la city porteña. En Rosario cotizó a 17,70 pesos.

«Cerca de la última hora de la jornada la divisa volvió a ser ofrecida por algunos bancos que tomaron en cuenta el feriado largo para colocar pesos en una tasa cercana a 25,50 por ciento nominal anual en el mercado de dinero, optimizando el rendimiento del capital», mencionó Fernando Izzo, de ABC Mercado de cambio.

La financiera Morgan Stanley consideró que la recuperación del peso argentino es de corto plazo por efecto de las elecciones y estimó que hacia fin de año el tipo de cambio estará en 18,50 pesos y en 22 pesos a fines de 2018.

«El peso está impulsado a la baja debido a la alta inflación y el déficit fiscal», señaló el estratega de mercados emergentes en Morgan Stanley, Andrés Jaime.

Jaime evaluó que «el déficit de cuenta corriente de Argentina está cerca del mayor nivel en más de 15 años debido a que la inversión extranjera directa y los ingresos de activos no están llegando con la rapidez necesaria».