Por Mario Luzuriaga

El festival de cine «Conecta 0.6» se está desarrollando en la ciudad, y en el mismo  el cine y las artes se expongan para el público en general, fortaleciendo un nuevo espacio de conexión entre las obras, los artistas y el público espectador.

Es por esto que el cortometraje «Dos mil y una noche» se proyectará en el evento el próximo sábado 2. Dicho corto tuvo un paso exitoso durante este año en varios festivales del país, pero también fue reconocido de manera internacional en Perú.

Lorena Cancela es una de las mujeres más respetadas en lo que respecta al mundo del cine, es Licenciada en Artes, escritora, periodista y este último tiempo se convirtió en realizadora, ya había dirigido con anterioridad el corto «Días de perra». Conclusión dialogó con ella y nos comentó que ella siente pasión por el cine.

—¿Cómo te sentís de participar de «Conecta 0.6»?

—Me siento muy honrada porque la programación es de primer nivel. De hecho también hay largometrajes que fueron premiados como el caso de «Alanis» o «La noche» de Edgardo Castro. Formar parte de una programación de ese nivel no deja de ser un honor para mi y le agradezco mucho a los organizadores.

—Tuviste un año movido en cuanto a festivales. ¿Cuál fue el recorrido que tuvo «Dos mil y una noche»?

—Cuando uno se plantea la proyección no piensa que va a trascender tanto. Uno lo presenta donde funcionó el primero, pero uno se va sorprendiendo porque cada corto abre su propio camino. Lo que me deja con enseñanza y alegría es que «Dos mil y una noche» haya empezado como un preestreno para amigos y después haya participado en el «Filma Corto» en Lima y que haya sido elegido para emitirse en el propio festival de cine de Lima.

—¿Cuál es la diferencia que tiene «Dos mil y una noche» con tu primer corto que fue «Días de perra»?

—Creo que aprendí mucho más, de un corto a otro es un aprendizaje y después en términos de la trama es una cuestión generacional. El primer corto retrata a una persona que va entrando en la adultez; en cambio en éste corto las personas están dentro del mundo adulto. En «Días de perra» la protagonista está buscando trabajo, aunque no se aclare, pero está esperando una llamada que de cuenta de eso. En el otro caso la protagonista, que soy yo, trabaja y está agobiada por la rutina laboral. Pero también hay similitudes como por ejemplo la presencia de la mascota, que es un personaje que posibilita diversas situaciones.

—Siempre estuviste del lado de analizar el cine, ¿cómo manejas tu veta de realizadora?

—Siento una gran alegría muy grande de poder hacer algo que uno tanto admira. Mis otras actividades en el cine vienen de la cinefilia y que por tanto las disfruté a todas. Si bien hacer estos cortos me ha dado mucho conocimiento, también siento que es parte del mismo camino. No es que me corrí de un bando al otro, de hecho sigo trabajando de periodista de cine y escribiendo. Sigue siendo más de lo mismo.

—¿Cuál es tu futuro? ¿Seguir con lo que haces o dedicarte full time a la realización?

—Uno tiene las ganas de seguir haciendo y sueño hacer un corto más y transitar por el color. Mis dos cortos son en blanco y negro y me queda la inquietud de hacerlo en color. Y la verdad no sé que dirección voy a tomar, se que el cine me dio amigos, relaciones y conocimiento. Me dio tantas cosas que lo que tenga que ser, será.