Todas las semanas se emite por Conclusión un ciclo que busca acercar la realidad, para poder interpelarla profundamente. Es por ello que Catalejo a lo largo de treinta minutos, aborda diversos temas ligados a la actualidad, cultura, salud, política, opinión e investigación, tratando de amplificar en todos los casos, un imprescindible debate.

En este capítulo Gisela Gentile y Alejandro Maidana dialogaron con el periodista y escritor Fernando Paolella, coautor del libro AMIA, la gran mentira oficial. Un trabajo tan minucioso como respetuoso de una causa plagada de oscuridad en donde los actores políticos y judiciales siguen desempeñando un papel vital para que la verdad siga alejándose.

La insistencia en condenar a la República Islámica de Irán como responsable de uno de los atentados mas aberrantes de la historia mundial, manifiesta un profundo desprecio por la verdad y la justicia. La pista siria, la figura clave del ex presidente Carlos Saúl Menem, el rol de los Estados Unidos y el sionismo internacional, en un análisis que solo persigue retomar la senda de una investigación que nunca fue.

El lunes 18 de julio de 1994, Buenos Aires viviría en carne propia un ataque terrorista que marcaría a fuego a la Argentina. Un escabroso saldo de 85 personas muertas y 300 heridas castigaría nuevamente a la comunidad judía, quién sufriría, hasta ese momento, el mayor ataque después de la Segunda Guerra Mundial.

En el 2001 se iniciaría un juicio que dejaría en su haber, más dudas que certezas. La investigación de una posible conexión local y la mira centrada en la pista iraní, harían que el juez Juan José Galeano avance en esa dirección. Del atentado que demolió la sede de la Amia, sólo aparecieron pistas falsas, datos inciertos y mentiras oficiales para que nunca se llegara a la verdad.

En los últimos días, la Cámara Federal de Casación Penal confirmó que existieron maniobras para impedir deliberadamente que se conozca la verdad y se haga justicia por el atentado a la AMIA. Por una parte, la sentencia ratificó la culpabilidad de funcionarios judiciales, políticos y de la ex SIDE por la implementación de esas maniobras.

Por la otra, descartó que se haya encubierto intencionalmente la pista que vinculaba a un allegado a Menem con el atentado, por lo que absolvió a los condenados en el juicio oral por encubrimiento. Según el fallo, el daño cometido a la investigación ha perjudicado “de manera casi irreversible la averiguación de la verdad”. Sin embargo, las penas fijadas a los funcionarios condenados por estos graves hechos no resultan proporcionales a la magnitud de semejante daño ni al reproche que merecen.

La responsabilidad de Irán, una hipótesis poco novedosa

Desde el CELS (Centro de Estudios Legales y Sociales), no dudaron en sostener que uno de los aspectos del fallo que mayor difusión pública tuvo fue el voto particular del juez Mahíques, el cual pretendió instalar que el atentado ya está resuelto, y que Irán y la organización Hezbollah son los responsables, cuando no hubo condena judicial alguna contra ellos.

Esta hipótesis no es novedosa y no debe ser descartada. Sin embargo, debe resaltarse que fue precisamente el accionar delictivo de los encubridores el que impidió que la información de inteligencia en la que se sustenta esa acusación sea confirmada con prueba judicial suficiente para una condena penal.

Ese mismo accionar encubridor explica que los dos juicios en los que se intentó determinar la responsabilidad de la supuesta “conexión local” del atentado terminaran en absoluciones. Otras consideraciones del juez Mahíques que fueron ampliamente difundidas tampoco son novedosas: el atentado fue declarado como delito de lesa humanidad en 2006.

Un gobierno nacional que repite actores y posicionamientos que colaboran con la impunidad

Consultado sobre las rancias novedades de la causa, Paolella realizó un paralelismo con una de las series televisivas mas taquilleras de la historia, V Invasión Extraterrestre. “En la misma los lagartos toman la tierra, en una de las secuencias un sobreviviente de Auschwitz guardaba luto, su hijo le pregunta el porqué, y este respondió, no te parece poco que el fascismo haya tomado la tierra. Lamentablemente hoy quienes gobiernan el mundo son los fascistas enmascarados en Estados Unidos e Israel”.

Paolella sostiene que es desopilante que pretendan hacer creer que un socio comercial de primera mano de Argentina en los 90 haya sido el responsable del atentado. “A esto lo dejamos en claro en el libro, de los 70 a los 90 los socios comerciales mas importantes eran la Unión Soviética y la República Islámica de Irán ¿Cómo un socio comercial va a atentar en contra nuestra? Aquellos que deslizaron la pista iraní, tienen en claro que la mayoría de los habitantes no tiene la mínima idea de geopolítica, por ende, se manipula la verdad. A la gente se la controla a través del miedo y la desinformación de lo contrario es incomprensible que Patricia Bullrich esté nuevamente en funciones”.

Quién también aparece en el radar del análisis sobre la bastardeada causa AMIA, es Guillermo Yanco, marido de Patricia Bullrich. “Yo lo conozco bien, jamás se investigo su vinculación con el tráfico de armas y su íntima relación con el Mosad (agencia de inteligencia israelí). Muchos saben de los vínculos carnales de Carlos Menem con actores non sanctos, la muerte de su hijo, en fin, en este país las mafias gozan de muy buena salud. El mundo del 88-90 es clave en todo esto, ya que la génesis del 2024 se encuentra en 1988, un año antes de la caída del muro de Berlín. Allí los bloques dominantes y el sionismo internacional, y ojo que no quiero caer en la sinarquía de la cual hizo referencia Juan Domingo Perón en 1973 pero tiene mucho que ver, nos muestra que la génesis de este 2024 es idéntica a la de 1988, ya que se repiten los actores principales”.