Un informe realizado por la Comisión Económica para América Latina (Cepal) sobre la banda ancha en América Latina y el Caribe en los últimos meses del 2016, evidenció que en los últimos cinco años, se aceleró notablemente el avance de Internet. Argentina lleva la posta en mayor porcentaje de usuarios y en el precio del servicio.

En América Latina y el Caribe, el 55% de sus habitantes usaron la red en 2015, 20 puntos porcentuales más que en 2010. La penetración de las conexiones en banda ancha también creció fuertemente, particularmente en la modalidad móvil, la que pasó de 7% a 58% de la población.

El número de hogares conectados a Internet en la región creció 14,1% promedio anual en los últimos cinco años, alcanzando el 43,4% del total en 2015, valor que casi duplica el de 2010. Pese a ello, más de la mitad de los hogares aún no cuenta con acceso.

Por su parte, Argentina tiene el mayor porcentaje de usuarios de Internet en América Latina (Aproximadamente un 69,4%). 

En términos de accesibilidad, en el 2010 se requería destinar cerca de 18% de los ingresos promedio mensuales para contratar un servicio de banda ancha fija de 1Mbps, mientras que a principios de 2016 esa cifra era de solo del 2%.

Pese a estos avances, quedan pendientes problemas relacionados con la calidad y equidad en el acceso a Internet. En términos de calidad del servicio, ningún país de la región tiene al menos 5% de sus conexiones con velocidades mayores de 15Mbps mientras que, en los países avanzados, el porcentaje de conexiones de esta velocidad es cercano al 50%.

En el caso de Argentina, en la actualidad se encuentra en tercer lugar detrás de Chile y Uruguay en cuanto a la velocidad de la conexión. Además, se encuentra en el podio de los precios.

Es decir, el servicio para tener acceso a la web en los hogares argentinos es el segundo con costos más elevados de Sudamérica por debajo de Bolivia que encabeza el ranking.

Los valores varían según las regiones y ciudades. Si se toma como ejemplo la ciudad de La Paz, el plan más costoso para las familias es de 20 megas y tiene un valor promedio de u$s 179 en la empresa Entel. Uno más económico, de 3 megas, de la compañía Tigo, sale u$s 26, y un intermedio de 8 megas cuesta u$s 64,84.

Con la excepción de Bolivia, en el resto de los países de la región pueden encontrarse planes promedio que ofrecen entre 20 y 30 megas. En algunos casos, como Brasil, Chile y Uruguay, de hecho, el paquete más económico no baja de los 30 megas (siempre, claro está, según las empresas relevadas).

En Argentina, Fibertel ofrece el plan de 25 megas a unos u$s49 y tiene una oferta más económica de 12 megas por u$s42. En Arnet, por ejemplo, el plan más económico de 6 megas cuesta u$s25. Existen además distintos combos que incluyen cable y teléfono fijo, por lo que se vuelve difícil realizar una comparación. Es el caso de Telecentro, que promociona los 30 mega (con TV HD incluida) por u$s64.

Después de la Argentina, Perú ocupa el tercer puesto del ranking de precios. Si se toma como promedio el servicio de 30 megas, en el país incaico Claro cobra u$s39,60. La opción más barata, de 8 megas, es de u$s26,85. La misma empresa, en Colombia, ofrece los 10 megas (la más económica) por u$s25 y su plan promedio de 20 megas cuesta u$s38,38. En Paraguay, la empresa Copaco cobra u$s35,90 por un plan de 35 megas mientras que tiene la opción más accesible de 3 megas por u$s23,40. En Ecuador, el básico de 10 megas de la empresa Metlife sale u$s23 y el abono de 20 megas, u$s34,99.

En Chile y Uruguay, los planes más económicos son de 30 megas. En el país trasandino, la empresa VTR cobra u$s31,68 por ese servicio, mientras que del otro lado del Río de La Plata Netgate lo ofrece por u$s31,33. En Brasil se encuentra el servicio más económico que, a la vez, ofrece desde su plan básico los 35 megas: la empresa TIM cobra u$s26,90 por ese paquete.

Las redes sociales, sin duda, influyen en la posición de Argentina como uno de los países más «consumidores» de internet de la región: de hecho, según un infome difundido en mayo pasado por IMS Mobile, el 85% de los argentinos que utiliza la web lo hace para conectarse en sus redes. La gran mayoría lleva a cabo esa tarea a través de los teléfonos móviles.