Trabajadores del sector salud nucleados en ATE Rosario reclamaron este miércoles que se mejoren las condiciones laborales para el personal de los tres niveles de atención provincial. Exigen la llegada de insumos básicos, pase a planta de todas las personas que trabajan en el área y licencias para quienes tienen enfermedades preexistentes.
«En los tres niveles de atención provincial hay déficit de recursos humanos, que encima están mal pagos porque no llegan a cubrir la canasta familiar. Tenemos que tener doble o triple empleo para poder cubrir las necesidades, y eso también implica mayor exposición al virus del covid. Además del cansancio que genera el estar en varios lugares de trabajo, expuestos a malas prácticas», destacó Regina Bianchi, secretaría de Acción Política del sindicato, en declaraciones a Conclusión.
Según advirtieron los manifestantes, en los efectores de salud faltan recursos materiales básicos. En el primer nivel, por ejemplo, no han recibido insumos necesarios como guantes y jeringas. La respuesta que reciben de las autoridades es que se debe a problemas en la licitación.
«Hace un año y medio que venimos con recortes de insumos. A su vez vemos que esta gestión tiene una mirada hospitalocéntrica, que en el momento de mayor algidez de la pandemia no desplegó un plan en el primer nivel de atención», criticó Bianchi.
Desde ATE Rosario también exigen que la totalidad de los trabajadores del Pami pasen a planta, ya que una parte del personal realiza sus tareas y luego factura como monotributista.
El gremio de estatales asegura que han mantenido distintas reuniones con funcionarios, pero las soluciones que se plantean en la mesa de dialogo no llegan a concretarse.
Guillermo Grand, delegado general adjunto de la junta interna de ATE Pami Rosario, señaló este miércoles que, si bien suelen trabajar con adultos mayores, aún no han completado la inmunización para la totalidad del personal. «Si bien viene bastante avanzado, todavía hay compañeros que no han podido vacunarse. Más allá de eso, están haciendo volver a trabajar a compañeros que habían sido licenciados por enfermedades preexistentes, que hace que el virus los pueda afectar de forma más contundente», apuntó.
Esos trabajadores están vacunados, pero siguen estando mayormente expuestos a las consecuencias de un contagio. Ante ese riesgo, el gremio propone que vuelvan a estar de licencia y sean reemplazados por otro personal.
Esteban Perrén, trabajador del Ministerio de Salud provincial que realiza tareas de informática, contó ante Conclusión que diariamente sale a recorrer vacunatorios y centros de salud, pero -al igual que otros de sus colegas del área- aun no ha sido vacunado. Según indicó, el reclamo ya fue elevado a la titular de la cartera sanitaria. Recibieron su palabra de que serían vacunados con la llegada de un cargamento de Sputnik V. Las dosis llegaron a la provincial, pero la citación no. «Presentamos un listado de 55 personas a vacunar, con todos los detalles de cada una, pero la respuesta sigue siendo negativa», expresó.
