Ruanda inició la repoblación del rinoceronte negro oriental con la llegada de diez ejemplares procedentes de Sudáfrica con los que pretende salvar la especie, extinguida en el país desde hace diez años.

«La vuelta de los rinocerontes al parque nacional de Akagera, abre un nueva etapa en nuestro camino de la conservación», dijo la directora general del Consejo de Desarrollo de Ruanda (RBD, en inglés), Clare Akamanzi, quién destacó el «impacto positivo» que tendrán para el turismo en el país.

Los rinocerontes llegaron esta madrugada al aeropuerto internacional de Kigali, y en las próximas semanas arribará otro grupo de diez ejemplares que también serán trasladados al parque de Akagera, muy cerca de la frontera con Tanzania.

Los rinocerontes vuelven a Ruanda después de que el último desapareciera en 2007, por lo que las autoridades destacaron que se trata de una oportunidad «valiosa» para la conservación y una «historia de esperanza para la especie».

A nivel mundial hay menos de 5.000 rinocerontes negros, de los cuales unos 1.000 pertenecen a la subespecie orientalm, según estimaciones de organizaciones conservacionistas. El parque de Akagera albergaba más de cincuenta rinocerontes en 1970, pero la caza furtiva a gran escala provocó un descenso de los ejemplares que provocó en 2007 su extinción.

En 2015, Ruanda reintrodujo en sus parques a siete leones, después de que desaparecieron en 1994 durante el genocidio, para reactivar el turismo de safari.

El turismo es la mayor fuente de ingresos procedentes del exterior para Ruanda, que obtuvo 860 millones de dólares en 2016, frente a 62 millones de 2000.