El seleccionado argentino se quedó anoche con el título del Mundial de Fútbol de Salón, al imponerse en el clásico sudamericano contra Brasil por 3 a 2 en el alargue, luego de haber empatado en dos durante el tiempo regular del partido disputado en Posadas.

El partido se desarrolló en el estadio Polideportivo Municipal de Montecarlo de la capital misionera ante más 6.500 espectadores, que observaron cómo Argentina logró esta coronación por segunda vez en su historia, luego de la conquista de 1994 en la misma sede.

En un primer tiempo parejo, el conjunto albiceleste presionó arriba y Brasil se defendió en los primeros minutos, aguantó y de a poco fue emparejando las acciones. El misionero Sandro Antiveros eludió al arquero para establecer la apertura del marcador.

Argentina continuó con la presión, pero de contra Brasil comenzó a llegar y logró el empate tras una corrida y centro atrás que Diego Da Costa la empujó al gol. A veinte segundos del final, los visitantes se pusieron en ventaja a través de Fernando Hamann.

El equipo argentino sintió el golpe, pero de todas formas buscó el empate y cuando se esfumaban las esperanzas, tras un lateral y a seis segundos de finalizar el tiempo reglamentario, Marcelo Mescolatti puso el agónico 2 a 2 para llegar al alargue.

En el suplementario, con el envión del gol sobre la hora, el que volvió a golpear fue el seleccionado argentino. Gonzalo Pires, el joven que estuvo cerca que perderse la competencia por una lesión, la mandó a la red con un disparo cruzado a los dos minutos.

Llegó el final del encuentro y se desató el delirio de la multitud en el Polideportivo Montecarlo. El título del seleccionado argentino de Futsal no tiene relación con la Copa del Mundo que conquistó en Colombia 2016, torneo que fue organizado por la Fifa.