Por Santiago A. Fraga
Después del duro golpe de la eliminación por Copa Sudamericana, Newell’s Old Boys necesitaba empezar este nuevo semestre con una alegría, y lo consiguió con el esfuerzo de sus principales valores.
El rojinegro derrotó por 2 a 0 a Central Córdoba de Santiago del Estero por la primera fecha de la Zona 2 de la Copa de la Liga, con Brian Aguirre como su principal figura y con Jorge Recalde, Armando Méndez e Iván Gómez como motores de un equipo que si bien logra jugar con su idea, todavía se nota que sigue padeciendo para traducir ese dominio en jugadas más claras, y eso es algo que puede volver a padecer ante rivales más complicados o, simplemente, en esos días en donde la pelota decide entrar al arco.
Y es que, al igual que en el torneo pasado y todavía sin refuerzos listos para el arranque en este, si bien la ‘Lepra’ generalmente logra imponer su idea en los partidos, en el desarrollo termina complicándose con su propio esquema, ya que se le dificulta generar peligro real en el área contraria por no contar entre sus titulares con alguien que cambie el ritmo en la zona del mediocampo.
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Dentro de la monotonía en la que termina cayendo el equipo, con Jorge Recalde teniendo que retroceder para intentar generar el juego él y con los carrileros -por ende- proyectándose bien pero tirando centros a nadie, Brian Aguirre fue el único que se corrió del plan general y propuso algo distinto, encarando constantemente y probando en reiteradas oportunidades al arquero Matías Mansilla.
Con uno de esos intentos, Newell’s tentó a la suerte y la terminó encontrando a los 35’, gracias a que el central del equipo santiagueño Gustavo Canto terminó desviando hacia su propio arco un envío del #18.
Ante un rival inferior, que de sus últimos 10 partidos ganó uno solo (precisamente a Newell’s en Santiago), el equipo de Gabriel Heinze no tuvo problemas para imponer sus condiciones de juego, sin aún así estar cerca de someterlo o de hacerlo sentir la presión.
Central Córdoba, al igual que varios de los últimos rivales de la ‘Lepra’ en el Coloso, decidió desde el primer momento dejar que el rojinegro maneje la pelota y apostó por intentar aprovechar de contragolpe alguno de sus errores, que aparecieron en reiteradas ocasiones con pases mal dados por los volantes o defensores.
Newell’s, por su parte, padeció el ritmo lento de Cristian Ferreira en los pasajes de transición y el tener a Ramiro Sordo prácticamente anulado por la misma naturaleza del esquema, que si bien liberaba a Aguirre para su juego también lo obligaba a él a mantenerse en un rol más de contención por el carril izquierdo.
Esto último, precisamente, fue lo primero que revirtió Gabriel Heinze en el complemento, al entender que el ataque del ‘Ferroviario’ no iba a representar un problema y que un central sobraba, pudiendo a su vez soltar más al #26.
Así fue que a los 5 minutos de la segunda mitad dio ingreso a Jherson Mosquera para ocupar el carril izquierdo en reemplazo de Facundo Mansilla, con Sordo situándose como extremo por derecha y el equipo plantándose 4-3-3.
Sin embargo, el colombiano no entró bien en el juego y los zagueros comenzaron a cometer muchos más errores en la salida, regalándole a la visita la oportunidad de empatar en más de una ocasión, por lo que quince minutos más tarde el ‘Gringo’ volvió a mover el banco con el ingreso de la más reciente incorporación, Ignacio Schor, en reemplazo de Sordo.
La aparición de Schor le aportó a Newell’s velocidad y presencia, siendo además un respiro para un Méndez que estaba haciendo el mayor desgaste en el equipo. Al mismo tiempo, al tener los tres de arriba mejor acomodados, Ferreira pudo regular más su esfuerzo y ser más claro en sus participaciones.
A pesar de la mejoría, la inocencia de Mosquera, ganándose dos amarillas con dos foules tan alevosos como evitables, terminó dejando al rojinegro con uno menos a falta de 15 minutos para el tiempo cumplido, obligando a que la salida de un cansado Ferreira, en vez de ser por Guillermo Balzi como originalmente estaba pensado, finalmente termine siendo por Augusto Schott, la segunda cara nueva que arribó a Rosario este mercado. El flamante lateral derecho debió ocupar el carril izquierdo, soltándose más Iván Gómez para ocupar el espacio dejado a las espaldas de Recalde.
En el momento justo, para no comenzar a sufrir la inferioridad numérica, en un contragolpe con un estupendo pase de Gómez aparecería nuevamente Brian Aguirre, armando un jugadón individual tras enganchar dos veces contra el zaguero y definiendo luego por entre las piernas del arquero Mansilla.
El 2-0 le dio aire a la ‘Lepra’ y terminó por sepultar las ilusiones del visitante, llevando a que incluso la diferencia pudiese ser más amplia de no ser por una gran atajada de Mansilla ante un remate de Gómez.
Así las cosas, la imagen final es de sonrisa para el hincha leproso, que disfrutará de los tres puntos y del respiro que el triunfo otorga mientras el plantel termina de conformarse. Las apariciones de Schor, Ordóñez y Schott pueden ser importantes si logran ponerse a punto como para estar desde el comienzo, pero también sigue faltando la figura de un revulsivo en el mediocampo que pueda compensar las características que no posee Ferreira, brindando más alternativas a un ataque que las necesita.
Párrafo aparte para un nuevo error arbitral en perjuicio de Newell’s: a los 47′ de la primera parte, el juez de línea levanta la bandera en un ataque de Brian Aguirre, contradiciendo a la propia indicación de los árbitros de dejar seguir la jugada para que en todo caso luego sea revisada por el VAR (algo que sí ocurrió en la segunda parte con una jugada de Schor). La interrupción de este avance claro terminó generando un malestar en el banco leproso, que derivó en el árbitro Pablo Echavarría expulsando a Gabriel Heinze y a su colaborador Nicolás Pavlovich.
