Luego de los graves incidentes entre facciones de la barra brava de Nueva Chicago que dejaron al menos tres personas heridas, la Justicia porteña resolvió en este comienzo de semana la clausura del estadio República de Mataderos.
La medida fue dispuesta por el juzgado 22 a cargo de la doctora Gabriela Zángaro y a pedido de los fiscales Gustavo Galante y Aníbal Brunet, por lo que la clausura implica la restricción del desarrollo de espectáculos futbolísticos según el artículo 96 del Código Contravencional.
Además, el Torito se expone a la sanción por parte del Tribunal de Disciplina de la AFA, donde deberá realizar un descargo sobre lo ocurrido en el inicio del encuentro frente a Temperley, por la fecha 17 de la zona A de la Primera Nacional.
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Al menos tres personas con heridas de diferente consideración fue el saldo de graves incidentes, que incluyeron ataques con armas blancas. Una de ellas fue atendida en el hospital Santojanni mientras que las otras fueron trasladadas con contusiones.
El violento episodio se produjo justo en el instante en que el árbitro Mario Ejarque dio el pitazo inicial y obligó a frenar el juego a los dos minutos del primer tiempo. El partido se reanudó más adelante sin saber el estado de las personas agredidas.
El fin de semana pasado, un hincha de Olimpo murió durante un ataque de personas identificadas con Villa Mitre, en la víspera del clásico de Bahía Blanca por el Federal A, mientras que barras de Independiente Rivadavia de Mendoza obligó a la suspensión de su juego frente a Atlanta por incidentes en las tribunas.
Por este motivo, la AFA repudió los hechos de violencia que se vivieron esta fecha en las canchas del fútbol argentino y se puso a disposición de las «autoridades para colaborar con la investigación» de los distintos casos en cuestión.
