Por Fabrizio Turturici

Central venció por 2-0 a Unión, en el partido de ida de los cuartos de Copa Santa Fe. El elenco juvenil de Leo Fernández volvió a dar la nota en el Gigante, tras imponerse con goles de Rodrigo Migone y Fernando Alarcón en la segunda parte.

El partido se inició con la intensidad propia de un cotejo de primera. Y aunque el local tenía mayoría de juveniles, nunca se notó la diferencia contra los experimentados de Unión. ¿Aparecerán bajo la consideración de Paolo Montero?

Con el correr de los minutos, los protagonistas levantaron el pie del acelerador y empezaron a estudiarse con cautela. La clave canalla estaba por el medio, precisamente en los pies de Joaquín Pereyra, a quien le costaba conectar juego con los delanteros.

El repliegue de Unión impedía el cómodo avance auriazul, pues los huecos no aparecían y la posesión adquiría el carácter de pasiva. De esta manera, Central sólo podía generar peligro a partir de la pelota parada.

Así fue como a los 34 minutos, desde el punto de penal, Coscia agitó los corazones canallas, pero no pudo romper la igualdad del trámite con su débil remate, que contuvo sin problemas el arquero Castro.

 

En el complemento, el conjunto rosarino buscó torcer la historia con cambio de nombres, pero sobretodo con una actitud más determinante en el área rival. Así, el ingresante Rodrigo Migone definió con sutileza en el mano a mano, para estampar el 1-0 parcial.

 

Poco tiempo después llegó una maniobra aérea que, tras el rebote del arquero, permitió a Fernando Alarcón estirar la ventaja a dos goles, lo que posiciona con tranquilidad al Canalla para la revancha en Santa Fe.

 

En líneas generales, el conjunto de Leo Fernández brindó otra imagen positiva de principio a fin: nunca fue superado por su rival, volvió a mantener el arco en cero y anotó por duplicado en el de enfrente.

 

Producción fotográfica: Marcelo Manera

Central confirmó a su cuarto refuerzo: Leonardo Gil llega al Canalla por cuatro años