La campeona provincial y nacional de Taekwondo, Maria Eugenia Farías, va por su objetivo más importante. Es que el 7, 8 y 9 de marzo de este año se llevará a cabo en Australia el Mundial de esta disciplina.
Cuando comenzó a gestarse este sueño, para la campeona fue muy difícil imaginarse allí, pero como objetivo, más en la vida de Maria Eugenia, si se planifica se puede lograr. Y es así como la representante de esta disciplina, tan antigua como exigente, pudo obtener el dinero para comprar los pasajes, mediante el esfuerzo y el trabajo conjunto con su entrenador, quienes van a representar a Rosario y al país.
En diálogo con Conclusión, la campeona expresó con alegría que «gracias a dios se encaminó todo y pudimos sacar los pasajes, así que salimos el 27 de febrero hacia Australia».
«Debido a la nota con el diario, hubo muchas repercusiones y se acercó mucha gente a ayudar. Desde políticos como Bonfatti, Sukerman, Cleri, hasta el sindicato Empleados de Comercio. Cada uno fue poniendo un grano de arena y, gracias a dios, puedo decir hoy que voy a estar en Australia representando a la Argentina, que es mi sueño y puedo cumplirlo» mencionó Farías.
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Queda poco tiempo y una meta realizable, que «es conseguir el traslado hacia Aeroparque» para cumplir con el objetivo puesto en primera instancia y que la campeona nacional pueda viajar concentrada en dar lo mejor de sí para ocupar el primer puesto en el podio del Mundial de Taekwondo.
Sobre la sensación que le deja esta previa a la competencia, la representante argentina mencionó que «estoy inmensamente agradecida por el apoyo, por todas las personas que no pudieron ayudarme económicamente, pero que me están ayudando de otra manera, como con la indumentaria deportiva y los suplementos que tengo que tomar para llegar bien al Mundial. El club Echesortu me ayudó un montón y me siento muy agradecida».
En relación a la preparación física Maria Eugenia Farías dijo que «me siento muy bien preparada físicamente, entrenado mucho, mañana, tarde y noche y enfocados solamente en lo que es el Mundial. Siento que este es mi mundial. Me siento preparada físicamente y creo que vamos a traer la medalla de oro».
«Al principio me agarró la desesperación porque empezó el año y no teníamos nada en concreto, pero yo dije si dios quiere vamos a poder y que así sea. Tal cual, fue así. Ayer fui a buscar una ayuda que me entregaron y salí llorando porque no podía creer que este a casi ocho días de viajar al Mundial a cumplir un sueño. Es muy emocionante» concluyó la campeona y representante argentina en Australia.
