Por Pablo Martínez

Argentina sigue siendo Messidependiente, el 10 es determinante en la Albiceleste, lo que parecía que Scaloni había mejorado con un equipo que rodeaba de buena manera al astro rosarino en el inicio de su ciclo, ya no existe y la Pulga volvió a ser figura en el combinado nacional.

Para el elenco nacional lo más importante de esta noche fue el triunfo, quizás era lo único, porque después de tres empates consecutivos había que ganar sí o sí, y se cumplió con el objetivo más allá de las formas.

Argentina se mostró decidido a llevarse la victoria y consiguió el desnivel en el inicio del juego, dándole tranquilidad para el resto del trámite. También es cierto que el nivel del equipo no conforma y que necesita seguir mejorando.

Messi por momentos, se puso el equipo al hombre, solo contra el mundo, consiguió asociarse muy pocas veces con sus compañeros, no se le puede pedir más al rosarino, que solitariamente quiere conseguir un título con la Argentina, una deuda pendiente que le pesa, y mucho.

Argentina ganó pero no mejoró en el rendimiento, involucionó con respecto al empate con Chile, Scaloni sigue dejando dudas y sigue probando variantes, en un equipo que no convence en su juego y de cara a la próxima fase, tendrá que cambiar la cara para enfrentar en una instancia decisiva al temible Brasil.