Por Pablo Martínez

Los deportistas rosarinos, siempre son noticia, se destacan en el circuito nacional e internacional. Hace una semana atrás, el jugador de vóley Sebastián Brajkovic, oriundo de San Lorenzo, se consagró campeón con Upcn de San Juan en el torneo nacional, al derrotar a Bolívar y conseguir su sexta coronación consecutiva.

Brajkovic de 34 años, tuvo un mano a mano con Conclusión e hizo un recorrido por su carrera deportiva, que lo encuentra en su mejor momento.

El representante rosarino de voleibol, comenzó hablando del título con el elenco sanjuanino: “Este año me tocó llegar en una situación auspiciosa, jugando en otra función y  fue fundamental la parte psicológica”.

La Asociación de Clubes Liga Argentina de Voleibol (Aclav), lo premió como el mejor armador del certamen: “Yo soy un poco apático de las premiaciones individuales, creo que es un deporte en equipo y que todo lo que se logra es en conjunto. Nunca dependimos de un jugador durante todo el año, quedó claro que es importante el trabajo en equipo”.

Sebastián Brajkovic se refirió al alto nivel del equipo cuyano, que consiguió seis veces el máximo logro y no baja el rendimiento: “Siempre me tocó verlo de afuera, cuando jugaba contra Upcn, yo me preguntaba por q ué iban al todo o nada y siempre lograban ganar. Y ahora, estando de adentro es que es el día a día, ellos la vara se la colocan cada vez más alta, con objetivos claros y firmes”.

“Upcn hace unos años atrás, arrancó con el objetivo de lograr el campeonato, le costó tres años, después fue por el Sudamericano y le costó otros tres años más. Y después, tuvo la chance de jugar un Mundial y en las últimas ediciones, conseguimos la medalla de bronce, es claro que se baja línea desde arriba, para conseguir todo, hay mucho trabajo y esfuerzo”, concluyó el voleibolista.

Pucho, como lo conocen sus conocidos, contó sus inicios en el vóley: “Empecé a los 15 años, en en el colegio San Carlos de San Lorenzo, presentándome en los torneos intercolegiales de la zona, por una viveza, me entere que cuando se jugaban los partidos, no ponían la falta en el colegio, me terminó anotando en todos los deportes y me incliné por el vóley, porque tenía unos amigos en Puerto San Martín, que me invitaron a jugar”.

“En clubes, mis inicios fueron en Central, después pasé a Sonder, donde juego mi primer Liga Nacional, de ahí a River, en el Metropolitano, después fui a España, pero se me complicó para volver por el estado de salud de mi papá, pasé a Formosa, donde tuve 4 años buenísimos que me hicieron crecer como jugador, tuve la suerte de compartir cancha con Milinkovic y Elgueta. Más tarde volví a Puerto San Martín, pasé por Chaco, otra vez Puerto y cuando pensaba en dejar el deporte, recibo el llamado de Upcn, que me vio la estantería y cambié el chip de golpe y me encamine de nuevo”, afirmó Brajkovic.

El armador del campeón cuyano, también se refirió a los objetivos por cumplir: “Lo que estoy viviendo en los últimos días, es un sueño, pero siempre me manejé por metas. Con repecto a la posibilidad de jugar en la selección, es como una deuda pendiente, una prueba en lo personal, tener la chance de defender los colores de tu país, en otros momentos tuve oportunidades pero nunca se dio la convocatoria y ya ahora, los armadores son galácticos”.

Por último, el rosarino, hizo un análisis del voleibol argentino: “Ha mejorado muchísimo, en los últimos años hay mejores en el nivel de los equipos y la calidad de jugadores que llegan desde otros países, se ha abierto el mercado de europeos, a mí me tocó jugar con dos búlgaros y un serbio, que tienen nivel de selección. Eso obliga a todos los equipos, ha esforzarse para poder reforzarse y en cuanto a lo dirigencial, fue importante el apoyo de gubernamental”.

Sebastián Brajkovic, vive un momento glorioso, pasó de finalizar su carrera deportiva a consagrarse campeón y ser elegido el mejor en su puesto, una historia forjada por el esfuerzo, el talento y la dedicación.