Carla Saccani es directora de teatro, actriz, escritora, productora y dicta talleres de actuación y dramaturgia. En su cargada agenda hace un tiempo para presentar su libro de poemas el sábado 13 de julio en Facultad Libre (9 de Julio 1122) a las 21.

«Es difícil, pero en todo pongo mucho deseo y por algo la cuestión del deseo hace que se abra el tiempo, que se expanda», dice la directora de teatro, al consultarle como caben tantas actividades y proyectos en su vida.

En una charla en Conclusión, la directora y dramaturga, sostiene que, lejos de lo popular y social, el teatro «durante mucho tiempo estuvo muy lejos de las expresiones populares. Siempre tuvo un posicionamiento en su historia desde un lugar combativo, pero no era así realmente. Ahora lo que hay es un espejismo, chicos de la clase media que simulan, que hacen de gente pobre, nunca estuvieron en contacto y hablan por. Es necesario que se posicione en la defensa de lo popular«. Y agregó: «No hace falta simular que uno tiene un barrio atrás que no tiene. Lo que sí creo que hace falta es interés genuino de lo popular».

No hace falta simular que uno tiene un barrio atrás que no tiene. Lo que sí creo que hace falta es interés genuino de lo popular

Sobre la presentación de 13, un compilado de poesía que «vengo escribiendo desde hace varios años», la autora del libro dijo que «hay un deseo muy fuerte de escuchar poesía y eso hace que el clima que se genere en los ciclos sea casi mágico. Es una cosa hermosa. Una sensibilidad compartida muy grande. Un espacio de resistencia absoluta. Estos poemas los venía compartiendo en donde me invitaban. Así que empezó la idea de hacerlo. Hable con la Ciudad de las Mujeres que es una editorial artesanal para publicarlo».

Por otra parte, la artista mostró su postura político-partidaria. Se reconoce militante y amante del peronismo. «Es inevitable vincular la producción artística al compromiso político«, dice. Sobre esta cuestión, expresa: «Me da la sensación de que cualquier artista o cualquier persona sensible tiene que ser peronista, porque es el lugar de la emancipación, es el espacio del pensamiento crítico, es el lugar propio del pueblo».

Al consultarle sobre si su postura política le trajo problemas en su proyectos, la escritora de 13 mencionó que «me repercute y me perjudica a nivel individual. Yo no soy una militante que trabaja para un candidato o en el Estado, entonces me sentí dentro de una lista negra. Pero el hecho de que te hagan la contra hace que uno se ponga más fuerte y piense cosas más creativas, más superadoras».

Yo no soy una militante que trabaja para un candidato o en el Estado, entonces me sentí dentro de una lista negra

«Yo siento que todavía estoy rindiendo en mis espacios con los recursos que pude absorber durante el kirchnerismo. Desde que está Macri no me puedo comprar libros y eso para una artista es muy importante«, arremetió la co-directora de Cien Evitas.