Los estadounidenses Stone Temple Pilots (STP), pioneros del grunge, llegarán al Teatro Ópera el martes en su segunda visita al país tras 11 años y luego de superar la muerte de dos de sus cantantes, algo que «seguramente» haya influenciado en su último disco, dijo el baterista Erik Kretz.

«Las canciones empiezan siempre jugando con la guitarra, a veces en pruebas de sonido o cuando tenemos tiempo de probar. Después aparecen las melodías, los puentes y todos los arreglos. Las letras tienen mucho que ver con la canción, dependen de la música. Hay una cierta influencia seguramente (de la muerte de sus compañeros) , pero depende de lo que salga en la música», dijo a Télam Kretz, en referencia a los fallecimientos de Chester Bennington y del incónico Scott Wayland.

Para suplantarlos, STP realizó audiencias mundiales y, finalmente, optaron por Jeff Gutt, quien resaltó en las emisiones del reality The X Factor y cautivó con su potencia a Kretz y a sus compañeros Dean y Robert DeLeo.

«Después de 5 canciones nos encantó, entonces le pedimos que volviera. Es muy talentoso, es genial y poderoso, el cantante que buscábamos. Desde entonces fue todo muy sencillo, se dio todo muy natural. Hasta ahora tuvo muy buenas críticas, estamos muy contentos», recordó el baterista.

Télam: Van a venir a Argentina después de varios años. ¿Qué recuerda de de ese show?

Erik Kretz: Me acuerdo lo hermosa que es Buenos Aires, teníamos muchas ganas de volver. Su país es muy lindo, es un público genial y la música argentina es genial. Siempre es un desafío tocar con semejante público, estamos muy excitados por volver a verlos. Es muy lindo encontrarse con algo así, nos encanta tocar para ustedes.

T: ¿Qué expectativas puede tener el público?

EK: Seguramente estén esperando algunos clásicos de los primeros discos y también algunas canciones de los álbumes más nuevos. Jeff es un gran cantante, así que puede adaptarse a las canciones de todos los discos.

T: ¿Cómo fue el proceso de su último álbum?

EK: Teníamos un par de canciones que ya habíamos grabado, así que para cuando se sumó Jeff directamente entramos al estudio para regrabar algunas melodías y que él grabara las voces. Después nos juntamos en mi estudio a componer el resto del álbum y salieron algunas otras canciones muy buenas que después pusimos en común y retocamos. De ahí salieron canciones como «Middle of Nowhere». Hay canciones que te hacen saltar, otras con más melodías. Es un gran disco de Stone Temple Pilots, creo que representa bien a la banda.

T: Sobre el sonido del álbum, suena más hard rock que los anteriores, que eran más grunge.

EK: Sí, puede ser. Tiene que ver con qué canciones componés y después cómo las acomodás. En este álbum tenés canciones como «Meadow» que es rock y otras como «Finest Hour» o «The Art of Letting Go», que son más tranquilas. Puede ser que tenga más guitarras. Por suerte es un álbum con muchos cambios, pero que a la vez tiene una uniformidad y logra ser íntimo.

T: La situación política de Estados Unidos, ¿influenció en la composición?

EK: Todas las canciones tienen su proceso. Algunas canciones, como «The Art of Letting Go», pueden ser llevadas para ese lado. Son casi 45 minutos de música donde todo se puede interpretar como le parezca al que lo escuche. Fue un disco muy espontáneo.