La justicia federal abrió una investigación para determinar el origen de las amenazas volcadas contra el expresidente Mauricio Macri y el fiscal federal Diego Luciani, entre otros.
Un hombre identificado como R.A.P. fue imputado por amenazar a una familia de Granadero Baigorria, a quienes les pedía dinero en efectivo. El sujeto fue capturado por la policía en un operativo de entrega controlada.
La imputada, de 51 años, retuvo a la víctima por más de 15 días en su domicilio. La golpeó a diario, le tiró agua hirviendo y la amenazó con un cuchillo, entre otros tormentos, para conseguir que la joven comercializara estupefacientes para ella.
Los acusados habían sido detenidos el pasado viernes por la noche y la Fiscalía los acusó de amenazas coactivas en carácter de coautores en concurso ideal con desbaratamiento de empresa.
La casa fue baleada en dos oportunidades, en la última su dueño fue herido en las piernas. La familia asegura que los ataques están dirigidos al dueño anterior de la vivienda.
La región del sur de Venezuela se caracteriza por ser rica en oro y otros minerales como hierro o coltán. En los últimos años escenario de violencia vinculada con mafias.
Desde el Ministerio Público de la Acusación señalaron que la banda fue integrada por los imputados de manera estable y con continuidad en el tiempo, con división de tareas y asignación de roles. Los cabecillas daban órdenes desde la Cárcel de Piñero.
La secretaria general de la entidad gremial expresó que “se vivió una mañana de mucha incertidumbre y miedo”. Valoró el hecho de que “los jefes de piso y protocolos estuvieron a la altura de las circunstancias”.
Se trata del recientemente electo titular del sindicato, Silvio Pablo Barrionuevo. Lo acusan de ocho delitos previos a las elecciones de este 20 de mayo.
La unidad va a contar con unos 30 efectivos y va a depender de la Dirección Operativa de la de AIC y mantendrá un estrecho codo a codo con la Fiscalía de Balaceras a fin de optimizar las investigaciones.
Esta mañana se conoció que hubo llamados intimidatorios a bares y restaurantes de la avenida Pellegrini, Pichincha y Fisherton entre otros. Si bien las amenazas se dieron este lunes por la noche, los gastronómicos destacaron que es "algo que ya venía ocurriendo".
Un fuerte nota amenazante y 45 balas fueron dejadas este miércoles en el colegio ubicado en España y Uriburu. La titular de la institución señaló que no saben desde donde viene la intimidación y destacó el trabajo que los docentes realizan en el colegio.