Luego de siete meses al alza, el gobierno de Javier Milei acumuló tres meses consecutivos con números negativos para el registro de ventas.
En los tres primeros meses del año, se comercializaron 328.332 unidades, una caída del 16,13% en comparación con igual período de 2023 (391.483 unidades).
Desde ACARA señalan que, en comparación con el mes de febrero, también se registró un descenso del 11%. De esta manera, en el primer trimestre del año, se patentaron 91.715 unidades; un 26,7% menos que el mismo período del año pasado.
Al igual que en enero, las elevadas tasas de inflación continuaron impactando en el poder de compra de las personas, profundizando la caída por la pérdida real de poder adquisitivo.
Si se hace una cronología de lo que ocurrió con el producto, en un principio, las carnicerías buscaron que su mercadería acompañara un poco la fuerte inflación de los dos primeros meses del año. Sus costos se aceleran a un ritmo importante y no querían tener pérdidas. Pero enseguida debieron retroceder porque el consumidor no convalidó el incremento.
En términos desestacionalizados, la producción del mes cayó 0,9% respecto a diciembre, encadenando dos meses en retroceso y retomando el sendero de caída luego del impasse registrado en noviembre, según la entidad.
De esta forma, se consolida el estancamiento y el derrumbe de dos ramas trascendentales de la economía nacional, que se viene observando cada vez más resentida con el desplome de rubros que conformar el motor del crecimiento.
La parálisis ya se nota en distintas obras privadas y, por supuesto, en la obra pública, sobre todo en el conurbano y el interior del país.
No obstante, en la medición desestacionalizada se registró un ligero avance del 0,6% respecto a octubre. A pesar de la caída interanual general, en el undécimo mes del año hubo sectores que se destacaron: por caso, la industria automotriz -luego del impasse registrado en octubre- tuvo una mejora.
Esto implicó a su vez una contracción desestacionalizada de 6,9% frente al mes anterior, con lo cual el indicador "mostró una fuerte contracción debido a la aceleración inflacionaria y la caída en el poder de compra".
Los complejos que presentaron las principales bajas, sobre todo por su importancia respecto a la participación en las exportaciones totales, fueron el de soja, con una merma interanual de 58,1% y una caída acumulada en el período enero-octubre del 38,3% hasta los US$ 11.740 millones; y el del maíz, cuyos despachos medidos en valor cayeron 40,6% en octubre y 31,9% hasta los US$ 5.721 millones en lo que va del año.
De esta manera, durante los nueve primeros meses del corriente año el Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE) acumuló un retroceso del 1,5%.