Los palestinos seguían conmocionados por la cifra de muertos del sábado, la peor en un periodo de 24 horas del conflicto en Gaza en meses, y que incluía a muchas mujeres y niños.
Además, decenas de personas resultaron heridas por el incendio que se produjo tras los ataques, que los residentes siguen intentando apagar.
Al difundirse en Gaza el anuncio, hubo celebraciones en las calles de varios lugares, como en Deir el Balah, en el centro de Gaza, y en la ciudad de Gaza.
Mientras tanto, los últimos esfuerzos por lograr un nuevo alto el fuego y un acuerdo de liberación de rehenes avanzan con dificultad, y tanto Israel como Hamás han afirmado que no cederán en sus principales demandas.
Más de 34.600 palestinos han muerto, 29 de ellos en las últimas 24 horas, y más de 77.000 han resultado heridos en el asalto israelí, según el Ministerio de Salud de Gaza. Los bombardeos han devastado gran parte del enclave costero y provocado una crisis humanitaria.
Durante la ofensiva, otros tres palestinos murieron y cuatro militares israelíes resultaron heridos, indicaron fuentes locales y de las fuerzas armadas de Israel. Se elevó a cuatro el total de fallecidos como consecuencia de la operación israelí.
Con las nueve naciones de esa zona (Arabia Saudita, Irak, Irán, Israel, Jordania, Kuwait, Líbano, Palestina y Siria), la Argentina tuvo balanza comercial favorable en 2023 y los principales productos exportados hacia la región fueron agropecuarios: harina de soja, carne bovina, yerba, maíz, arroz, maní y garbanzos.
En el escrito, el mandatario celebró "el incondicional compromiso" del Gobierno argentino "con la seguridad israelí".
El Gobierno sentó uno de los posicionamientos internacionales más enérgicos frente al ascenso de la tensión bélica entre Irán e Israel.
"Todo el mundo libre está amenazado. Esto de ser neutral o no neutral quedó en desuso. No hay distinción de si Argentina es o no un punto de riesgo, el mundo está en riesgo", justificó el vocero presidencial, Manuel Adorni, en la habitual conferencia de prensa matutina.
Entre ellas, se destaca el refuerzo de la seguridad, con importante custodia, con el objetivo de garantizar el normal desarrollo de sus actividades. Esto se da en el marco de declaraciones de funcionarios argentinos, que argumentaron que el país podía ser víctima de atentados.
Los dirigentes, funcionarios, gobernadores y legisladores de gran parte del arco político condenaron la agudización del conflicto en Medio Oriente.