El ejército israelí ordenó a los palestinos abandonar algunas zonas del este de la ciudad de Rafah en previsión de una operación «limitada» en el sur de la Franja de Gaza.

Unas 100.000 personas fueron instruidas a que se dirijan a una «zona humanitaria ampliada» en Jan Yunis y al Mawasi.

Tras siete meses de guerra, Israel afirma que debe tomar Rafah para derrotar al grupo palestino Hamás.

Pero la ONU y Estados Unidos han advertido que un asalto a Rafah, donde se refugian más de un millón de palestinos que ya habían sido desplazados, podría tener consecuencias catastróficas.

Un alto cargo de Hamás, Sami Abu Zuhri, declaró que la orden israelí supone «una peligrosa escalada que tendrá consecuencias».

Según diversos reportes, los ataques aéreos israelíes en Rafah mataron al menos a 19 palestinos durante la noche anterior, después de que cohetes lanzados desde la zona por combatientes de Hamás mataran a cuatro soldados israelíes en el cercano paso fronterizo de Kerem Shalom, punto clave de entrada de ayuda humanitaria en Gaza. El paso fue cerrado tras el ataque.

También se ha informado de ataques israelíes en Rafah, horas después de que se emitiera la orden de evacuación.

Mientras tanto, los últimos esfuerzos por lograr un nuevo alto el fuego y un acuerdo de liberación de rehenes avanzan con dificultad, y tanto Israel como Hamás han afirmado que no cederán en sus principales demandas.

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Hamás quiere un final permanente de la guerra, que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dice no poder aceptar. Los mediadores afirman que prosiguen sus esfuerzos.

La agencia de la ONU para los refugiados palestinos (Unrwa, por sus siglas en inglés), que dirige la mayor organización humanitaria en Gaza, dijo que las «consecuencias serían devastadoras para 1,4 millones de personas» en Rafah.

La Unrwa añadió en un post en X que no evacuaría y que mantendría su presencia en la ciudad «mientras sea posible y seguirá proporcionando ayuda vital a la gente».

 

En tanto, James Elder, portavoz de la agencia de la ONU para la infancia, Unicef, que estuvo en Gaza el mes pasado, dijo que ahora las familias no tienen más remedio que dirigirse hacia zonas que ya están superpobladas y carecen de servicios básicos.

«Se mueven porque o se trasladan o los bombardean. Pero se trasladarán a lugares donde no hay agua -no un poco, sino nada de agua- ni saneamiento», reforzó,

El jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell, calificó de «inaceptable» la orden de evacuación del lunes.

«La UE, con la comunidad internacional, puede y debe actuar para evitar este escenario», escribió en X.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, habló el lunes por teléfono con Netanyahu sobre Rafah.

Biden reiteró su «clara posición sobre Rafah» respecto a que no apoya una invasión sin un plan para ayudar a los civiles que se refugian allí.