El titular de la organización sindical de los estatales, Rodolfo Aguiar, apuntó al Gobierno de Milei: “A escondidas quisieron otorgarse aumentos millonarios en sus sueldos mientras mantienen los salarios y las jubilaciones congeladas”.
Según consultoras, en la primera semana de marzo hubo una suba en los precios de alimentos y bebidas. El Gobierno nacional apuntó días atrás contra las promociones y los descuentos, ya que sostienen que impiden demostrar una baja en la inflación.
El equipo económico del Gobierno nacional asegura que las empresas aplicaron fuertes subas que ahora están "corrigiendo a través de ofertas de 2x1 o 60% de descuento".
Luis Arce también reconoció que aún queda mucho por hacer para combatir la pobreza, la desigualdad y la corrupción. Agregó que se debe fortalecer la institucionalidad democrática y garantizar la participación ciudadana en la toma de decisiones.
La inflación galopante que desplomó el valor a los billetes de mayor denominación también contribuyó a que la gente se inclinara por adoptar nuevos hábitos de pago electrónico, evitando de esa forma la acumulación de fajos de dinero en los bolsillos.
El economista realizó una radiografía de las políticas económicas del oficialismo y consideró que se queda corto con algunas medidas y que también tiene una deuda con el impacto que ocasiona en el bolsillo de los trabajadores y los jubilados.
El funcionario nacional planteó que los montos responden directamente al objetivo de ordenar las cuentas públicas a través de un ajuste, tal fue propuesto a lo largo de la campaña electoral.
"En moneda constante, significa volver a salarios de mayo de 2005. Es la mayor caída real interanual desde marzo de 2003 (post- salida convertibilidad)", indicó el economista Salvador Vitelli.
Un informe realizado por el Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (Isepci), en el conurbano bonaerense, una familia tipo necesitaba, para alimentarse en febrero, $182.905,48. Y a día de hoy, para cubrir esos mismos alimentos necesita $310.431,58.
La entidad gremial resolvió acentuar sus medidas de acción directa después de que los representantes empresariales de ATA y CAPIT, no hicieran una “propuesta concreta” a sus demandas salariales en base a la inflación en la reunión de este miércoles 6.
Los congresistas piden tratarlo la próxima semana y que comience su aplicación a partir de los haberes del mes de abril.
El acumulado del primer bimestre del año marcó un declive de 27% respecto al mismo período de 2023, según la Came.