En enero de 2021, las exportaciones alcanzaron los u$s 4.912 millones y aumentaron un 7,3% interanual y las importaciones totalizaron u$s 3.844 millones y aumentaron 8,7%, respecto al primer mes del año pasado.
Si bien el resultado entre los bienes exportados e importados durante noviembre fue un superávit de 271 millones de dólares, esa cifra viene en caída y es peor en 2019, un año negativo. Brasil, China y Estados Unidos cada vez colocan más productos de los que se llevan.
La balanza comercial de septiembre arrojó un superávit u$s 1.160 millones inferior a igual período de 2019, y se produjo principalmente por la caída de las exportaciones en u$s 1.035 millones y una suba de u$s 125 millones de las importaciones, indicó el Indec.
En el séptimo mes del año la cuenta corriente externa volvió a dar positivo, por el derrumbe de importaciones. Argentina sigue teniendo una relación comercial desequilibrada con el Nafta (Estados Unidos, México y Canadá), Brasil y China, con quienes más comercia.
En el marco de una caída en los precios y las cantidades exportadas e importadas, las exportaciones tuvieron una facturación de US$ 4.329 millones, un 18,9% por debajo de la de abril del año pasado, mientras que las importaciones alcanzaron los US$ 2.918 millones, con una merma del 30,1% interanual.
La consultora Ecolatina pronosticó que el saldo comercial alcanzará este año a los US$ 1.200 millones.
Las cifras oficiales del Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE), que viene en baja desde hace 17 meses, registraron una suba del 1,9% en octubre en comparación con septiembre último, lo que alienta a entusiastas de una salida “rápida” de la recesión.
En septiembre hubo un aumento interanual de las exportaciones del 14,1% y una caída de las importaciones del 14,9 %.
Las exportaciones subieron en agosto un 7,5% mientras que las importaciones cayeron 30,3%, según cifras del Indec.
En julio las importaciones totalizaron 4.905 millones de dólares y las exportaciones sumaron 5.856 millones. La baja en la importación se explica en gran parte por el valor del dólar y la recesión, que relegan consumo y adquisición de bienes de capital.
No es lo mismo alcanzar un superávit comercial por un repunte de las exportaciones producto de una mejora real de la competitividad, que por un desplome de las importaciones resultante de una mega devaluación.
Según datos publicados por el Indec este jueves, el país exportó en el primer mes del año por 4586 milles de dólares mientras que se importó en torno a los 4214 millones. Salieron bienes por casi un 5% menos que hace un año y las importaciones siguen bajísimas por el alto valor del dólar.