La Comisión Administrativa de ATE Ensenada denunció «persecución gremial» por parte de las nuevas autoridades del Astillero Río Santiago, encabezadas por Daniel Capdevilla, que según el sindicato perjudica «no solo a la organización sino también a los trabajadores de la empresa».

Entre las distintas denuncias que efectuaron contra la nueva conducción política del Astillero, el gremio destacó que «se han quitado horas de insalubridad y jornada reducida de ciertos sectores de la empresa, se quiere reducir el ausentismo de enfermedades prolongadas no avalando los certificados médicos, hay presión para intimidar y generar temor entre los trabajadores».

Asimismo, detallaron que «no han dejado sacar trabajos del sector de estructura para un armador argentino y no se pudieron arenar piezas listas para entregar», entre otros puntos.

«Hay automóviles que pasan sospechosamente por la puerta del gremio y toman fotografías, sin contar que en la empresa hay un maltrato manifiesto con los trabajadores», precisó el sindicato.

Capdevilla asumió sus funciones el día 7 de mayo y «como primera medida despidió a personal de carrera del Astillero, generando incertidumbre en los operarios de la fábrica».