Empleados de Fabricaciones Militares denunciaron hoy 140 despidos en el organismo dependiente del Ministerio de Defensa y se manifestaron en la entrada de la sede central, en el barrio porteño de Belgrano.

Un operativo de la Policía Federal impidió a primera hora el ingreso al edificio ubicado en la avenida Cabildo 65 y los empleados debieron hacer fila para conocer si se encontraban en la lista de cesanteados.

Los damnificados subrayaron que el día anterior habían acudido a sus puestos de manera habitual, hecho por el cual resaltaron la sorpresa ante el panorama delineado por la mañana de este jueves.

En ese escenario, llevaron a cabo un corte en la avenida para reclamar la reincorporación de los despedidos, mientras los operarios de Fabricaciones Militares de diferentes puntos del país pusieron en marcha un paro de 48 horas para «frenar los despidos estatales».

«Una vergüenza lo que están haciendo sin causa ni notificación no dejan entrar a trabajar a 140 personas. A las 9.30 asamblea en la puerta» escribió en su cuenta de Twitter el delegado de ATE. Se informó además que en la lista de despedidos hay una mujer embarazada y que los despidos se producen sin aviso previo.

Así, las huelgas se llevaban a cabo en simultáneo en Río Tercero, Villa María y Jáchal.

«Estos despidos se hacen sin causa ni notificación»

Fabricaciones Militares posee cinco plantas productivas ubicadas en Azul, Santa Fe, San Juan y Córdoba, en las cuales se desarrollan productos y servicios ligados con la industria para la defensa.

«Las nuevas autoridades, encabezadas por el secretario de Ciencia, Tecnología y Producción para la Defensa, Héctor Lostri, asumieron hace tan sólo unos días y, además, de la reducción brutal de empleados están achicando el organismo, que genera una importante cantidad de empleo indirecto en cada ciudad con sus
fábricas», denunciaron los trabajadores.

Y agregaron que «tras el vaciamiento y cierre de diez de sus plantas en la década del ´90, en los últimos años Fabricaciones Militares había revitalizado su rol crucial en la industria nacional con hechos concretos, como la apertura de una nueva fábrica, luego de más de 60 años, en San José de Jáchal, San Juan».

Maia Goldín, trabajadora despedida, habló en Radio del Plata y contó que no recibieron telegramas. “Llegué a las 7 de la mañana como todos los días. Había cuatro policías y la seguridad privada con una lista adentro. Pregunté y me dijeron que como estaba en la lista no podía ingresar. Pregunté los motivos y me respondieron que eran órdenes del nuevo interventor” describió indignada.

“Soy ingeniera química, tengo 28 años, me gradué a los 24 con diploma de honor en la UBA. Estoy terminando un posgrado de ingeniería en petróleo. La realidad es que no hay motivos para despedir”, explicó.

La trabajadora denunció el vaciamiento de Fabricaciones Militares. “Así como estoy yo fuera, hay 20 ingenieros más esperando una respuesta. Las áreas que se están vaciando son todas las que tienen que ver con la producción en la fábrica, con el planeamiento industrial. Esto ya sucedió en los 90”.

Entre los atropellos a la política productiva, la ingeniera dijo: “Hemos diseñado la ingeniería completa de una planta nueva. Personalmente estuve a cargo del proceso de montado de toda la planta de chalecos anti balas que se instaló en 2013. Nunca antes se habían fabricado en la industria nacional”, manifestó angustiada..

Los despidos en Fabricaciones militares se suman a los sucedidos en otros espacios de la administración, como en el Senado, en el Centro Cultural Kircher y en el Ministerio de Cultura. En este último caso, los empleados realizarán esta tarde una asamblea frente al despacho del ministro, titular de la cartera, Pablo Avelluto.

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