Trabajadores de la salud pública municipal se movilizaron este miércoles para reclamar mejores condiciones laborales para el sector y una recomposición salarial acorde. Reiteraron su rechazo a la política de ofrecimiento de sumas en negro y advirtieron que el personal sanitario está saturado y agotado.

La movilización inició en el Hospital de Emergencias Clemente Alvarez (Heca) y luego se trasladó hasta las puertas del Centro de Especialidades Médicas Ambulatorias de Rosario (Cemar), donde se interrumpió el tránsito vehicular de San Luis al 2000.

Según explicó Alejandro ‘Cacho’ Parlante, delegado de los trabajadores del Heca, el reclamo se dio por la «necesidad de contar con equipos de protección personal e ingreso de personal con derechos, porque los pocos que vienen ingresando lo están haciendo como monotributistas».

«En el hospital hay alrededor de 60 trabajadores infectados en el último mes y medio. A eso hay que multiplicarlo por dos o tres por los compañeros aislados. Son jornadas extenuantes, sin descanso. Se está trabajando muy mal y las autoridades hacen todo al revés. Abren nuevas actividades en el pico de la pandemia», se quejó el gremialista en declaraciones a Conclusión.

Por su parte, el secretario general del Sindicato de Trabajadores Municipales de Rosario, Antonio Ratner, contó ante Conclusión que mantuvieron contacto con el personal de distintos efectores de salud, quienes indicaron que hay personas cumpliendo turnos que van de 12 a 16 horas diarias.

«A veces trabajan sin elementos necesarios, ni reemplazos o francos compensatorios. Algunos compañeros no tienen descanso desde el 1 de abril. Eso puede llevarlos a cometer algún tipo de errores», advirtió Ratner.

Respecto a la necesidad de contar con una recomposición salarial para los trabajadores del sector, el sindicalista repudió la política de ofrecer sumas en negro y aseguró que no discutirán «tan llanamente un acuerdo».

«Queremos sentarnos en una mesa y poner todos los elementos sobre la misma. No aceptamos sumas en negro ni dejamos de lado a nuestros jubilados y contratados. Tenemos que acordar una política como Rosario merece», aseveró.