La Justicia Laboral de Rosario resolvió que el call center Dynatac del grupo Easy Call debe reabrir sus puertas para que los trabajadores puedan vovler a trabajar en forma presencial. Esta importante y necesaria medida está asegurada con una multa de 40.000 pesos diarios en caso de desobediencia.
Desde el inicio de la pandemia la mayoría de los call center enviaron a sus trabajadores a realizar las tareas laborales desde sus casas, destacando que si bien no eran lugares aptos para su realización, fue una medida de urgencia que con el correr del tiempo debía volver a la normalidad. «A partir de la implementación del trabajo en el domicilio, se dieron una gran cantidad de abusos, como el descuento de sueldos por cortes de luz o internet, sanciones y todo esto en un contexto en donde no se les proporcionó las herramientas adecuadas de trabajo» destacó Federico Thomson, representante de la Asociación Empleados de Comercio de Rosario que patrocinó la presentación legal.
Después de la pandemia, casi la mayoría de estas empresas volvieron a la presencialidad, menos el call center Dynatac del grupo Easy Call. «No sólo los mantuvo trabajando en su casa sino que continuó con todos estos abusos» subrayó el letrado
En este contexto, el fallo del juez Gustavo Burgio obliga a la empresa a abrir sus puertas y volver a la presencialidad. «Esta medida está asegurada mediante el pago de una multa en caso de desobediencia de 40.000 pesos diarios. Actualmente se está instrumentando el mecanismo que establece la sentencia para que un oficial de justicia se constituya en el lugar, y se proceda a la efectiva posesión de los trabajos de los reclamantes».
Una vez que este firmada la orden al oficial de justicia, tiene que abrir en el mismo momento que se presente al cumplimiento de la medida. «Seguramente este proceso lleve unos días, lo firmará el juez y se fijará la fecha» concluyó
