Los taxistas de la ciudad se volvieron a manifestar para reiterar el pedido de asistencia económica que les permita paliar la caída de trabajo en el sector, desatada a partir de la pandemia del coronavirus y su consecuente cuarentena obligatoria.

Entre los reclamos se encuentran el acceso al Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) que otorgará el Gobierno nacional; una tarjeta alimentaria y la entrega de bolsones de productos básicos.

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El motivo es el mismo desde que arrancamos la cuarentena. Necesitamos una ayuda porque la familia taxista la está pasando muy mal. Nos prometieron entrar en el bono de 10 mil pesos, una tarjeta alimentaria, un sueldo mínimos vital y móvil de Anses, y todavía nada”, lamentó preocupado en diálogo con Conclusión Iván Chaparro, uno de los perjudicados.

Para ilustrar la difícil situación que atraviesan, dijo que “tenemos compañeros que desde que arrancó la cuarentena, los titulares le sacaron el auto y no los ayudan económicamente. Muchos son cabeza de familia y sin esa plata no llega nada a la casa”.

“Necesitamos una mano de verdad. Nadie se está haciendo cargo de nuestra situación.

Del petitorio de la semana pasada no tuvimos ninguna respuesta. Nadie se contactó con nosotros. Hay familias que no podemos aguantar más esta situación”, cerró angustiado.

La concentración se realizó en el cruce Alberdi, para luego movilizar hasta el Sindicato de Peones de Taxis, Gobernación y terminar finalmente en la Municipalidad, donde aguardan por algún referente del área de Desarrollo Social que los atienda y les de una respuesta.