La firma agroindustrial Vicentín cumplió este martes 40 días declarada en default con deudas de alrededor de US$1.000 millones y la compañía sigue sin cumplir con la presentación de un plan de pagos.
Lo cierto es que, mientras los días se acumulan, también lo hacen los cheques rechazados en la central de deudores del BCRA. Hasta el momento, totalizan unos 60 millones de pesos.
Es así que, a pesar de la insistencia de la Bolsa de Comercio de Rosario para que la empresa presente alternativas de pago concretas, las deudas con productores, acopios y cooperativas proveedoras de granos siguen acumulándose. El monto total adeudado a estos últimos llega a los u$s350 millones.
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Una parte importante -u$s100 millones- es adeudada a la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA), la mas grande de las cooperativas agrícolas argentinas.
Vicentín tiene su apuesta hecha allí. Desde finales de diciembre se encuentra negociando con la Asociación en busca de que la misma vuelva a proveerle materia prima que le permita reactivar las dos plantas -ubicadas en San Lorenzo y Ricardone- que la firma agroindustrial hoy tiene paradas.
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Cabe aclarar que ACA sigue de cerca las renegociación de deuda que Vicentín buscará ante los bancos argentinos. Es que, el mayor acreedor de la firma en el sistema financiero es la banca pública. Con el Banco Nación tiene tomados créditos por poco más de $18.100 millones, mientras que con el Banco Provincia otros $1.600 millones.
Según trascendió, ninguna de las dos entidades bancarias estaría dispuesta a facilitar un recorte de deuda millonario como el que pretende la empresa agroindustrial. Esto -comprenden- sería una postergación implícita al sector pyme, con una gran cantidad de pequeñas y medianas empresas que entraron en cesación de pagos, sin la capacidad de vender activos para financiarse.
