El niño de ocho años diagnosticado con hepatitis severa de origen desconocido que fue intervenido durante la jornada del martes en el Sanatorio de Niños continúa evolucionando de manera favorable.

Por la relevancia de dicha intervención y el pos operatorio, diariamente se difunden los partes médicos que indican el estado del menor. En esta oportunidad, el médico Lisandro Bitetti profundizó al respecto, «las muestras que estamos realizando indican que el órgano está funcionando y el hecho de que haya despertado y ya se encuentre desvinculado del respirador quiere decir que todo estaría marchando en los parámetros favorables».

Esta buena respuesta, alienta al personal de salud, «hoy se lo desvinculó del respirador más allá de seguir con asistencia ventilatoria. Realmente venimos como queremos. Está despierto, más allá de encontrarse la mayoría del tiempo somnoliento, «de a poco se va recuperando, los laboratorios siguen mejorando, pero hay que seguir siendo cautos en el pos operatorio más allá de su favorable evolución».

En torno a la comunicación que mantienen con el menor, el doctor sostuvo que «le preguntamos como se siente o si se encuentra cómodo, más que eso no dialogamos. A medida que comience a ver y sentir que tiene drenaje o cosas invasivas, le iremos explicando que significa todo ello».

En torno a los cuidados que se deben seguir teniendo el profesional indicó «tenemos que continuar controlando su evolución, y en torno a ello ir corrigiendo las cosas que creamos necesarias y si surge una complicación tratarla precozmente».

Basándose en la complejidad que acarrea este tipo de intervenciones, el proceso evolutivo es muy bueno. «Venimos muy conformes, siempre sabiendo que las cosas pueden cambiar de un momento para otro».

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Producto de la analgesia y sedación, aún el niño no sabe el procedimiento al que fue sometido. «Faltan unos días para que esté a un 100% lúcido. En todo trasplante hepático siempre pueden aparecer situaciones que se resuelven en el día a día, manejando la medicación, etc. Por lo cual los días de internación no puede establecerse de antemano».

El hígado es un órgano que funciona como filtro, «sin él, el niño seguiría dormido, en respirador y sin contemplar todos los pasos positivos que están sucediendo», enfatizó el profesional.

Para finalizar Bitetti reflexionó: «es fundamental resaltar, que todo esto es posible gracias a la donación, es importante poder aprovechar estos momentos de exposición para recordar a la población que sin donación no hay trasplante».