Todas las semanas se emite por el canal de Youtube de Conclusión un ciclo que buscará acercar la realidad, para poder interpelarla profundamente. Es por ello que Catalejo, a lo largo de treinta minutos, abordará diversos temas ligados a la actualidad, cultura, salud, política, opinión e investigación, tratando de amplificar en todos los casos, un imprescindible debate.
En este capítulo, Facundo Peralta, referente de la Organización Popular CAUSA, brindó detalles sobre un proyecto que nace en el corazón de zona oeste, y que pretender ser ariete de otras conquistas. Desde abajo y con la dignidad como bandera, construyendo comunidad desde la mirada hacia el otra, un camino resiliente que tiene como única meta transformar la realidad de los olvidados.
En un terreno abandonado por el Estado y recuperado por los vecinos y vecinas de Villa Banana y Bella Vista, se está levantando una Escuela popular. Un proyecto comunitario integral. Estos terrenos fueron entregados en su momento por la provincia a un club para que este lleve adelante diversas actividades. Por distintas razones el club se retiró del lugar quedando el terreno en estado de abandono y sujeto a hechos de vandalismo, por lo tanto, dejando de cumplir con su función social.
El predio donde se encuentran anclados los sueños de la “Escuela corazón de barrio”, está ubicado entre las calles 27 de febrero y Valparaíso, en la confluencia de los barrios villa banana y bellavista de la ciudad de Rosario. La construcción comenzó en el 2020, en medio del parate de la pandemia, ya que las necesidades más urgentes no pueden esperar. Llegamos hasta acá con un gran esfuerzo colectivo.
El proyecto de la escuela popular “Corazón de barrio”, tiene como meta contar con tres aéreas, un espacio para la primera infancia denominada la gurisada, una huerta agroecológica con fines socioeducativos, y un salón para talleres y usos múltiples destinado principalmente a las juventudes. El predio también cuenta con un amplio espacio verde utilizado para potenciar el encuentro. Cabe destacar que el nombre de la escuela popular, corazón de barrio, fue votado por vecinas y vecinos, quienes son protagonistas principales del proyecto.
El deseo de quienes llevan adelante y construyen desde el pie, es poder inaugurar el espacio en el mes de agosto, por ello se solicita un último esfuerzo buscando comprometer a la sociedad en lo que claramente se erige coma una alternativa potable para escaparle al dolor y la impotencia que genera la desigualdad.
