Por Alejandro Maidana

La voz de los vecinos del acceso sur de Rosario se viene alzando hace mucho tiempo sin encontrar respuesta alguna por parte del Estado. Los mismos vienen denunciando la contaminación generada por el funcionamiento de los 180 silos ubicados en el espacio del ENAPRO en el Puerto de Rosario. Contaminación visibilizada por el polvillo y cascarillas que permanentemente riegan los barrios con veneno, provocando problemas de salud en la población.

Este agente contaminante residual, llega por el aire afectando a barrios como La Sexta, Tablada, Echeverría, Villa Manuelita, Universitario, Municipal, y otros. La “llovizna” de polvillo y cascarillas de cereal (en general de tono rojizo) inundan patios, terrazas y calles, sembrando inquietud para los neófitos en el tema, y suma preocupación en los concientizados sobre sus efectos.

También te puede interesar: Vecinos renuevan el alerta por contaminación ambiental

Cabe destacar que en el último informe realizado por Conclusión, se pudo detallar con precisión el mal funcionamiento de estas unidades portuarias gracias al trabajo de Medio Ambiente. Si bien desde el Estado pudieron constatar estas anomalías que afectan la salud de los pobladores que abrazan esta zona portuaria, no ha existido aún la solución a esta problemática.

Es por ello que este jueves a las 11 en el Ministerio de Medio Ambiente de la Provincia (San Martín y Montevideo),  el grupo de vecinos organizados en VACCA, invita a las organizaciones sociales y a la población en general, a acompañarlos en la presentación de un petitorio firmado por cientos de rosarinos para exigir a las autoridades nacionales, provinciales y municipales, tengan la amabilidad de resolver este grave problema

El mismo será acompañado con un escrito en el cual se manifiestan los lo serios problemas que ocasionan estas cuestiones, antecedentes judiciales ( como es el fallo de la justicia dando la razón a los Vecinos del barrio Refinería litigando contra la misma empresa), y la exigencia hacia la provincia y municipalidad para que entreguen toda la información de inspecciones realizadas en dicho sitios, como así también, las estadísticas sobre situación de salud de las zonas afectadas para poder analizar con mayor precisión el impacto ambiental.

En este escrito se exige” la suspensión inmediata del funcionamiento de los silos en cuestión hasta tanto se aborde la situación de fondo”. Indicando además, que “siendo los trabajadores de los mismos, los principales afectados de estas actividades, se reasignen sus trabajos en otros sectores del puerto (de hecho cosa que ocurre en forma habitual) y la intervención de la provincia a tal efecto”.

“La deriva del cereal ha generado en los habitantes de la zona cercana al puerto dolencias de distinta índole. Debido a esto consultamos con los médicos de la zona para conocer su punto de vista, hace ya más de dos años que estamos articulando reuniones con vecinos y visitando las escuelas, ya que el polvillo en suspensión se manifiesta de manera muy explícita”, contó Patricia, integrante de VACCA en diálogo con Conclusión.

La actividad cotidiana de los porteros de las distintas instituciones de este sector de la ciudad, suele tener su eje en barrer la deriva del cereal que se aloja en calles y veredas. La decisión de confeccionar un petitorio comenzaría a ganar fuerza, “junto a las personas que venimos articulando distintos tipos de reclamos decidimos ir trabajando sobre un petitorio para formalizar nuestra queja ante el Estado. Más de 2.000 firmas pudimos recolectar, siendo los vecinos de Villa Manuelita los que más han participado debido a que son los más afectados”, sostuvo Patricia.

“Si bien venimos visibilizando esta problemática de diferentes modos, necesitábamos darle una vuelta legal, por eso este paso tan importante. Afectados por esta contaminación y diferentes grupos ambientalistas acompañaron esta iniciativa, pero es de vital importancia que la sociedad en su conjunto nos brinde su apoyo. Si bien los agrotóxicos matan, la indiferencia también”, concluyó.