Un grupo de 17 turistas argentinos quedó varado en la Aduana brasileña de Foz do Iguazú, tras intentar sortear sin éxito el puente Tancredo Neves, para acceder a Puerto Iguazú, y acampar en la mitad del recorrido del paso internacional que fue suspendido por el cierre de fronteras que dispuso el presidente Alberto Fernández para contener la pandemia del coronavirus.

Se trata de turistas procedentes de Estados Unidos y distintas localidades brasileñas, los cuales, pese a las advertencias de las autoridades brasileñas de que si intentaban sortear el puente, si no lo lograban no les iban a dejar retornar por una disposición tomada por el país vecino, decidieron tratar de llegar a Puerto Iguazú, pero se encontraron con las vallas colocadas por autoridades argentinas.

«No nos queda otra», argumentaron al justificar la empresa frustrada. Los turistas debieron ser asistidos en medio del puente por varias horas por policías brasileños, mientras que desde Gendarmería les alcanzaron una carpa para que puedan guarecerse del sol subtropical, según el sitio Misionesonline.

Cuando estaban dispuestos a pasar la noche en un sector del puente alejado en dos kilómetros del baño más cercano, los efectivos brasileños los condujeron a la Aduana local, donde fueron guarecidos, pero tenían incertidumbre sobre los pasos siguientes.

Una de las mujeres varadas, Anabel Ojeda, relató la situación desesperada en la que quedó inmersa. explicó.

Hasta la semana pasada, el puente internacional Tancredo Neves se había convertido en una alternativa para cientos de turistas argentinos procedentes de Estados Unidos y Europa, que aprovechaban para llegar a Brasil, país que no restringió sus vuelos, y de allí concretar la repatriación, en medio de las restricciones por la pandemia.